Los estados de la materia se transforman mediante varios procesos que implican cambios en la energía de las partículas. La sublimación inversa es cuando un gas se convierte directamente en sólido, mientras que la condensación es el paso de gas a líquido mediante la eliminación de calor.
Es el cambio de estado de líquido a sólido. Ocurre cuando se elimina calor de una sustancia líquida, lo que disminuye la energía cinética de las partículas hasta que las fuerzas de atracción entre ellas son suficientemente fuertes para formar una estructura ordenada. Como resultado, las partículas se vuelven menos móviles y la sustancia se solidifica.
Condensación
Es el cambio de estado de gas a líquido. Ocurre cuando se elimina calor de un gas, lo que disminuye la energía cinética de las partículas y las fuerzas de atracción se vuelven lo suficientemente fuertes como para mantenerlas juntas en una estructura líquida.
Sublimación
Es el cambio de estado directo de sólido a gas, o viceversa, sin pasar por el estado líquido intermedio. En la sublimación, las partículas sólidas ganan energía suficiente para pasar directamente al estado gaseoso, o las partículas gaseosas pierden energía suficiente para condensarse directamente en estado sólido.
Sublimación Inversa
Es el proceso en el cual un gas se convierte directamente en sólido, omitiendo el estado líquido intermedio. Las partículas gaseosas pierden suficiente energía para formar un sólido directamente.
Vaporización
Es el cambio de estado de líquido a gas. Durante la vaporización, las partículas de un líquido adquieren suficiente energía cinética para vencer las fuerzas de atracción intermoleculares y escapar hacia el estado gaseoso. Este proceso puede ocurrir de dos formas: evaporación, que ocurre a temperaturas inferiores al punto de ebullición, y ebullición, que ocurre a una temperatura específica conocida como punto de ebullición.
Fusión
Es el cambio de estado de sólido a líquido. Ocurre cuando se añade calor a una sustancia sólida, lo que aumenta la energía cinética de las partículas hasta el punto en que superan las fuerzas de atracción que las mantienen en una estructura ordenada. Como resultado, las partículas se vuelven más móviles y la sustancia se convierte en líquido.
Estados
Solido
En este estado, las partículas están muy cercanas entre sí y tienen una estructura ordenada. Tienen una forma y un volumen definidos.
Líquido
En este estado, las partículas están más separadas que en un sólido, pero aún están lo suficientemente cerca como para moverse unas sobre otras. Los líquidos tienen un volumen definido pero no una forma definida, ya que toman la forma del recipiente que los contiene.
Condensado de Bose-Einstein
Este es un estado extremadamente frío de la materia en el que las partículas se han enfriado hasta casi detenerse por completo. En este estado, las partículas se comportan como una sola entidad cuántica y exhiben propiedades extrañas, como la superfluidez y la superconductividad.
Plasma
El plasma es un estado de la materia en el que los átomos se han ionizado, lo que significa que han perdido o ganado electrones. Esto crea una mezcla de partículas cargadas positiva y negativamente. El plasma es el estado más común en el universo, y se encuentra en estrellas, relámpagos y lámparas fluorescentes, entre otros lugares.
Gaseoso
En el estado gaseoso, las partículas están muy separadas y se mueven libremente. Los gases no tienen ni forma ni volumen definidos, ya que ocupan todo el espacio disponible.