GUERRA FRIA, DISTENCION Y SOLUCION DE CONFLICTOS

INTRODUCCION

LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL ES EL TIEMPO DE CONSAGRACION DE DOS GRANDES POTENCIAS

SE TRATA DEL INICIO DE UNA ETAPA NUEVA Y DISTINTA

QUE SE PRESENTA CARACTERIZADA POR 5 GRANDES RASGOS

Hegemonía de las dos súper potencias nucleares que diseñan muy rápidamente sus respectivas zonas o esferas de influencia, articulándolas en mecanismos económicos inflexibles y en sistemas militares cerrados.

La aparición del riesgo nuclear, no como hipótesis sino como posibilidad real, transformará el concepto de guerra total, la idea de guerra generalizada; las armas nucleares han hecho imposible, hasta la fecha, el enfrentamiento armado directo entre las dos súper potencias; pero, en paralelo a este fenómeno y a la carrera armamentista

El no a la guerra nuclear y a la guerra generalizada ha supuesto, de rechazo, la proliferación de conflictos armados localizados, regionales, en la periferia del sistema; un sistema quizá ejemplar, por sus efectos demostrativos, en Europa, pero que ha corrido con todos los gastos y con todos sus riesgos en el exterior

Como se ha señalado en los párrafos anteriores, la bilateralización de las relaciones internacionales ha destrozado el concepto clásico de gran potencia y ha fulminado la figura equilibradora del
Directorio

La incidencia que los fenómenos más arriba descritos han tenido sobre la misma disciplina académica de las relaciones internacionales que, casi olvidadas ya por los expertos sus naturales aspiraciones
cienlíficas

IDEAS DE LA FUERZA DINAMICA DE LAS RELACIONES INTERNACIONALES

LA GUERRA FRIA

El debate sobre los orígenes de la Guerra Fría aún no se ha cerrado. Algunos, bastantes, los sitúan, desde una perspectiva rigurosamente armamentista, bien en el monopolio nuclear norteamericano,
bien en el duopolio nuclear ruso-americano.

Con el decurso del tiempo mostró su irracionalidad, permite establecer algunos rasgos definitorios no sólo de su esencia sino también de su comportamiento táctico.

La ausencia, la renuncia, la imposibilidad de la guerra generalizada, de la guerra total, que
por la utilización de las armas nucleares equivaldría a la extinción de la existencia de parte considerable del género humano.

La Guerra Fría no es un mensaje
abstracto vacío de contenido, necesitaba y necesita, para su pervivencia, ser retroalimentado por tensiones continuas; un estado de alerta permanente, de desconfianza recíproca, donde desempeña un papel básico la llamada guerra de propaganda o ideológica; el espíritu de cruzada sin cuartel, en una acción de doble sentido, requiere aquellas tensiones.

Este período en estudio es el
mismo en el que acaece la descolonización y donde surgen numerosas guerras de liberación nacional; en esta perspectiva, situaciones como la del Sudeste Asiático o el Cercano Oriente son ilustraciones adecuadas de estos conflictos rigurosamente localizados.

La presencia de las súper potencias no es sólo ideológica, sino también económica y militar, lo que no es obstáculo para que, en situaciones límites, también estén presentes con sus propias
fuerzas armadas, pero cuidando exquisitamente que nunca coincidan en un mismo conflicto armado los ejércitos de la Unión Soviética y los de Estados Unidos

LA COEXISTENCIA PACIFICA

Es la otra alternativa, paralela a la Guerra Fría, que han conocido
las relaciones internacionales desde 1945. También han sido numerosos sus comentaristas, entusiastas o detractores, así como los debates acerca de su origen

la Coexistencia Pacífica de
N. Kruschev consistía en que cada una de las dos súper potencias demostrase universalmente las excelencias de cada sistema, en un proceso emulativo, marginando el uso de la fuerza en sus relaciones mutuas

DE LA VIEJA A LA NUEVA EUROPA

En 1946, Winston Churchill proclamaba: «Desde Sttetin a Trieste ha caído un telón de acero. Por lo que yo he aprendido de nuestros amigos los rusos durante la guerra, estoy convencido de que no hay otra cosa que adoren tanto como la fuerza, ni otra que respeten menos que la debilidad militar.

¿Podría ser esta compartimentación político-económico-militar el proyecto deseable, ideal, para una reestructuración europea, superadora de la herencia de la Segunda Guerra Mundial y de sus consecuencias bélico-ideológicas?

En mayo de 1949, nacía el Consejo de Europa, con la visión puesta en la edificación de un espacio privilegiado para la defensa de los derechos humanos y para la protección de las libertades. Dos años más tarde, abril de 1951, le llegaba el turno a la Comunidad Europea del Carbón y del Acero.

Desde entonces, comienza a esbozarse en el horizonte europeo
una meta que, de alcanzarse algún día, significaría el rechazo definitivo de toda tentación expansionista y de todo aventurismo totalitario

La Europa del Este mira cada vez con mayor atención el modelo occidental, fundamentado en el respeto y la defensa de los derechos fundamentales. Este es el camino que conduce a una Europa sin fronteras económicas, sin divisiones ideológicas y sin realidades militares.

DINAMICA GLOBAL Y NUEVA DISTRIBUCION DEL PODER

Aunque las relaciones venían deteriorándose
entre las súper potencias que, además, habían endurecido sus liderazgos respectivos en el seno de sus respectivos bloques, la fecha crítica señalada en el calendario sería la del 27 de diciembre de 1979,la intervención soviética en Afganistán, que reavivaría finalmente las estridencias de la Guerra Fría

La realidad del desarme se ha incorporado
plenamente al lenguaje habitual. Las alabanzas a los progresos de la aplicación de la doctrina de los derechos humanos en la Unión Soviética se manifiestan sin reticencias. Nadie utiliza la terminología agresiva, enemigo contra enemigo, de la Guerra Fría.

Se produce una
serie de transformaciones en la estrategia militar, que tendrán especial relevancia en la norteamericana, conducente a la supresión o aminoración de la vieja idea del paraguas nuclear estadounidense garantizando la seguridad de Europa Occidental.