Proceso de aculturación y adaptación del inmigrante: características individuales y redes sociales

Adaptación y Aculturación

Las características individuales de los inmigrantes

El modelo de aculturación propuesto por Berry (1989) es de gran interés en la psicología intercultural, ya que permite, en primer lugar, analizar el proceso de aculturación en los diversos niveles sociales, grupales e individuales, y en segundo lugar, si se tiene en cuenta la aculturación a nivel individual, los estilos de aculturación están relacionados con las dimensiones básicas de la personalidad. En la teoría de la personalidad hay un grupo de variables, generalmente llamadas “dimensiones básicas de la personalidad”, que no suelen ser modificadas por factores situacionales, ya que están determinadas en gran medida por factores biológicos y genéticos (ej.: Neuroticismo, Afabilidad, Extraversión, Responsabilidad, Apertura). Estas dimensiones de base probablemente pueden ser consideradas como factores que influyen significativamente en el comportamiento social.

Las Estrategias de Afrontamiento

Las reflexiones expuestas anteriormente como profesionales del com portamiento humano nos invitan a preguntarnos: ¿Cómo lidiar con las dificultades y tensiones propias de la migración? ¿Cómo se afectan las cogniciones, las dimensiones afectivas y valorativas del inmigrante? Bajo estas circunstancias, una persona puede contar con muchos y diversos recursos para afrontar un problema, pero puede suceder que no los perciba, o que no tenga la habilidad para utilizarlos, sobre todo cuando tiene que enfrentarse a ambientes, costumbres y contextos sociales diversos, desafiantes y hasta amenazantes.

La valoración –afrontamiento cognitivo:

Se orienta a un intento por encontrar un significado al suceso y valorarlo de manera que resulte menos amenazante o desagradable. Desde lo cognitivo, Wolchick y Sandler (1997) en un estudio con adolescentes vícti
mas del huracán “Hugo” hallaron una relación positiva entre las estrategias de afrontamiento utilizadas desde la cognición y el nivel de severidad de los síntomas. Encontraron que la distracción, la solución de problemas y la búsqueda de apoyo social fueron las

El problema –afrontamiento conductual:

Es la conducta dirigida a confrontar la realidad, manejando sus consecuencias. Desde la solución del problema, la inmigración supone una reorganización interna caracterizada por la búsqueda de un equilibrio entre la asimilación de lo nuevo y la reubicación de lo dejado atrás. Así como también enfrentar situaciones cotidianas que implican la toma de decisiones de lo más simple hasta lo más complejo. Es aquí donde las teorías del afrontamiento cobran su importancia, en la medida que a través de ellas el inmigrante puede desarro llar alternativas que superan las emociones negativas y actuar de manera proactiva en la toma de decisiones, lo que facilitará su proceso de adaptación y ajuste a la nueva sociedad.

La emoción –afrontamiento afectivo:

Regulación de los aspectos emocionales e intento de mantener el equilibrio afectivo. Desde lo emocional, el inmigrante –generalmente– enfrenta un proceso crítico y complejo de elaboración de duelos, de resistencia, de discriminación, no exento de dolor y sufrimiento; así las cosas, cuando se prolongan las incertidumbres aflora la inseguridad, la nostalgia, acompañada de tristeza, sentimientos de culpa, ideas de muerte, desordenes psíquico-somáticos o ansioso-depresivos, lo cual agudiza su situación y da paso a estrategias de afrontamiento emocionales y de evitación, lo cual afecta sus habilidades para un afrontamiento positivo o más centrado en el problema.

Sociedad de acogida y redes sociales de los inmigrantes

Históricamente las migraciones no han ido acompañadas de canales de participación e integración entre autóctonos e inmigrantes. En la década de 1970 la percepción sobre los inmigrantes en los Estados Unidos era negativa, eran vistos como “indeseables”, incluso entre psiquiatras y psicólogos (ej.: Kamin, 1974), quienes tuvieron un papel importante en el apoyo “científico” de la “indeseabilidad” a través del uso de tests de inteligencia que incidieron en reformas políticas para limitar la entrada de más inmigrantes y justificar la no participación de estos en la sociedad receptora.

No hay que desconocer que la sociedad dominante o mayoritaria es la que establece las normas y las leyes por las que se rigen nativos y extranjeros; pero el control en la demanda y acceso a servicios sociales, de empleo, educación, salud, derechos de participación, así como el acceso a los entes gubernamentales, etc., están generalmente condicionados al status migratorio, el cual es potestad del grupo dominante, lo cual determina hasta el sistema de relaciones interpersonales y de accesibilidad a servicios estatales y de participación social, política y económica

Kate Ivannia Urenda Gonzalez