La clase invertida

Cada alumno es diferente y tiene unas necesidades de aprendizaje distintas. El entorno de dicho aprendizaje tiene que ser lo suficientemente flexible como para adaptarse a los distintos ritmos y formas de atención de los alumnos.

La ratio de alumnos para llevar a cabo este tipo de clases nos debe permitir un seguimiento individualizado del alumno. El hecho de dedicar la clase a la tarea nos permite poder atender mucho mejor a las necesidades específicas de cada estudiante.

Para realizar nuestros materiales de las clases invertidas, contamos con muchísimos soportes y opciones para los que hay que formarse. No se trata de utilizar todos los soportes posibles, sino de diversificar para adaptarse a las necesidades de cada proyecto. Esta diversificación permite adaptarse a los procesos de aprndizaje de cada alumno.Actualmente, hay muchos cursos para formarse en TIC. Os enlazo la información al curso de la UNED "Tecnologías para profesores".

Es importante que preparemos bien los materiales y que aprendamos a jerarquizar la información. Internet es una selva y nuestro rol como profesores es guiar a nuestros estudiantes para que no se pierdan. Sólo estructurando bien la información, podremos asegurar un aprendizaje eficaz.

Tenemos que ser capaces de adaptar los objetivos que planteamos a la diversidad de nuestros alumnos. No partimos todos del mismo punto, así es que hay que saber adaptarse a cada uno de ellos. No podemos pedir lo mismo si no partimos del mismo punto. La inteligencia es saber adaptarse.

Os propongo, para practicar los conceptos que hemos visto, la creación de los materiales y las dinámicas para hacer una clase invertida sobre el tema que más os interese. Se trata de una actividad abierta a todos los que habéis seguido esta presentación. Creatividad al poder. Podéis hacer un mapa conceptual para explicar cómo será vuestra clase invertida y compartirlo con nosotros.

El alumno tiene que ser protagonista de su propio aprendizaje y debemos ofrecerle la oportunidad de valorar los contenidos y los materiales. El proceso de aprendizaje debe retroalimentarse constantemente.

En este proceso de conciencia del aprendizaje, el alumno debe saber en qué punto está en cada momento. Para ello, tenemos que contar con diferentes niveles de aprendizaje que el estudiante pueda valorar en cada momento.

Realizar la tarea en clase permite, sin duda alguna, que el profesor pueda revisarla mucho mejor dando el feedback en el momento adecuado.

Al estilo de la mayéutica socrática, el profesor debe preguntar más que responder. La pregunta es una herramienta poderosa para la toma de conciencia.