CONSULTORÍA.

DEFINICIÓN.

Es un servicio profesional especializado en áreas, prestado por empresas o por profesionales (conocidas como consultoras o consultores, respectivamente) con experiencia o conocimientos específicos en un área, asesorando a personas, a otras empresas, a grupos de empresas, a países o a organizaciones en general. Puede centrarse en consultoría integral o en un área específica.

OBJETIVO.

El objetivo fundamental de la consultoría profesional es proporcionar recomendaciones viables e implantar medidas apropiadas para aumentar la productividad y la competitividad de las empresas.

ETAPAS.

Iniciación (preparación inicial)

• Primeros contactos con el cliente

• Diagnóstico preliminar

• Planear el cometido

• Propuesta de tareas

• Contrato

Diagnóstico

• Descubrir los hechos

• Análisis y síntesis

• Examen detallado del problema.

Planificación de medidas (Plan de acción)

• Elaborar soluciones

• Evaluar opciones

• Propuesta al cliente

• Planear la aplicación de medidas

• Identificar y proponer inversiones

Aplicación (implementar)

• Contribuir a la aplicación

• Propuesta de ajustes

• Capacitación

Terminación

• Evaluación

• Informe final

• Establecer Compromisos

• Planes de seguimiento

• Retirada

Relevancia e importancia de la Consultoría.

La consultoría representa ventajas por ser una visión externa actuando sobre la empresa, permitiendo una percepción más crítica de la realidad.El proceso de consultoría en una organización es extremadamente útil, dado que las empresas precisan constantemente mejorar su desempeño, productividad, su orientación estratégica y sus planes de acción, innovando y/o agregando valor a servicios/productos, proporcionando mejoras en los procesos internos como en los más diversos aspectos.

Perfil del Consultor.

Alto grado de experiencia y formación.

Cómo experto en el sector debe contar con un alto grado de formación especializada en su ámbito de trabajo, al mismo tiempo que debe complementarla con experiencia laboral, que le haya aportado los conocimientos suficiente para saber cuáles son las decisiones que llevarán a la empresa a aumentar sus beneficios.

Habilidades personales.

Debe ser una persona proactiva y trabajadora, que luche por alcanzar las mejores soluciones, al mismo tiempo que resolutiva, para afrontar los posibles imprevisto a los que tenga que enfrentarse.

Buen Comunicador.

El consultor tiene una amplia orientación al cliente, por lo que las dotes de comunicación son fundamentales, para convencer a las empresas de que es la persona adecuada para alcanzar los objetivos que se esperan de él.

Saber escuchar

Para conocer las necesidades de cada empresa es necesario saber escuchar las necesidades del cliente, pero no solo lo que nos pide la persona que nos está contratando, si no en general a los distintos agentes que intervienen en la consecución de objetivos: trabajadores, proveedores

Capacidad de Análisis

El consultor no puede solo limitarse a proponer planes y soluciones, tiene que tener la capacidad de realizar un trabajo analítico que justifique su trabajo, de la manera más clara y sintética posible.

Flexible y Trabajador

El trabajo del consultor, requiere de un alto grado de implicación y compromiso con los objetivos marcados. Para ello es imprescindible que cuente con mucha capacidad de trabajo, y flexibilidad para adaptarse a los diferentes plazos y horarios establecidos por el cliente.

Tipos de la Consultoría.

Consultoría a emprendedores y pymes.

La asesoría se concentran en un solo método que incluye solo los elementos más esenciales para el despegue y consolidación del negocio.

Consultoría estratégica.

Sus competencias están relacionadas con los planes estratégicos de la empresa para conseguir buenos resultados de explotación y que sea un negocio más productivo.

Consultoría financiera.

Se ocupan de la parte económica de la compañía. Sus recomendaciones se orientan hacia la consecución de la viabilidad económica y las cuentas saneadas de la empresa.

Consultoría de marketing y publicidad.

Los consultores de empresas se centran en la captación y fidelización de los clientes de una compañía estudiando sus patrones de compra o comportamiento.

Consultoría legal.

Es una actividad que comprende todo el acompañamiento jurídico y legal que se ofrece dentro de las diversas disciplinas del derecho.

Consultoría tecnológica.

Una consultoría tecnológica centra sus esfuerzos en aconsejar a otras empresas cómo usar las tecnologías de la información para conseguir sus objetivos empresariales.

Consultoría especializada

Hay determinadas actividades que requieren contar con consultores expertos relacionados con la implantación de los sistemas de gestión.

Calidad.

Medio Ambiente.

Prevención de riesgos.

Seguridad vial.

Alimentación

Modelo de Excelencia

Protección de Ley de Datos

Etcétera.