rEl Estado Novo, establecido por Getúlio Vargas en Brasil entre 1937 y 1945, marcó un período de cambios significativos en el país. A nivel político, Vargas implementó un gobierno centralizado y autoritario, pero también introdujo importantes reformas sociales. Creó leyes laborales que protegían a los trabajadores, estableció el salario mínimo y reguló las horas de trabajo. En el ámbito social, promovió la educación pública y la asistencia sanitaria, mejorando las condiciones de vida de muchos brasileños. Estos cambios le valieron a Vargas el apodo de "Padre de los pobres", ya que sus políticas beneficiaron especialmente a las clases trabajadoras y menos favorecidas.
Uno de los logros más destacados del Estado Novo fue el impulso a la industrialización del país. Vargas fundó Petrobras, la empresa petrolera estatal, en 1953, lo que permitió a Brasil controlar sus recursos petroleros y generar importantes ingresos. Además, fomentó el desarrollo de la industria siderúrgica, creando la Compañía Siderúrgica Nacional en 1941. Estas iniciativas, junto con otras políticas de industrialización, generaron millones de nuevos empleos y sentaron las bases para el crecimiento económico de Brasil en las décadas siguientes. La visión de Vargas de un Brasil industrializado y económicamente independiente transformó profundamente la estructura económica y social del país, dejando un legado duradero en la historia brasileña.
El gobierno de Getúlio Vargas en Brasil (1930-1945 y 1951-1954) fue un período de transformación significativa,