Manifestaciones proyectivas de conflicto psicológico en el dibujo de la figura humana de niños y niñas
La vulnerabilidad de la primera infancia en Colombia comienza desde antes del nacimiento, cuando la madre transita por escenarios de violencia (intrafamiliar y social) un contexto bélico que la excluye, cosifica y discrimina
en dicha condición emergen factores de riesgo importantes para el desarrollo del neonato y determina medidas de protección en la madre que a menudo pasan por la sumisión (pasividad ante el agresor), la confrontación o en su defecto el escape.
imprime en los niños y niñas representaciones negativas acerca de la vida y las relaciones humanas, es decir imágenes, ideas y fantasías ambivalentes respecto al poder y la dominación, mismas que al volverse parte del discurso cotidiano, hacen que la muerte pierda “su sentido de naturalidad, para convertirse en una condición de facto, producto de la crueldad del otro que ostenta el poder destructivo”
el éxodo continuo eleva la vulnerabilidad psicosocial de familias que se instalan en lugares confinados, de naturaleza peligrosa (con presencia de pandillas, expendios de drogas, etc.) y sin continuidad en el acceso a los servicios básicos u oportunidades laborales, factores que contrastan con la ampliación de la tasa de desempleo regional, el aumento del subempleo o informalidad, además de la explotación laboral, el riesgo de abuso sexual, y acciones de maltrato y trabajo infantil.
la percepción negativa acerca de funcionalidad de las unidades de atención, llegando a connotarse como insuficientes, cooptadas o ineficaces en la asignación de recursos para cubrir sus demandas y necesidades preparatorias.
Las personas desplazadas deben aprender a luchar con preocupaciones emanadas de sus escasos recursos económicos y conflictos psicológicos, estos últimos son producto de los efectos negativos del estrés postraumático y el estrés agudo especialmente.
la importancia de los dibujos de figuras humanas, radica en el hecho de representar una forma de comunicación no verbal importante entre el examinador y el examinado (niño), que proporciona claves precisas acerca de su estado emocional
por lo que los dibujos pueden analizarse en función de la forma como se presentan, de acuerdo a la edad y el contexto es decir, por la estructura (particularidades), por su calidad (detalles poco comunes, omisiones o elementos agregados), como también, de acuerdo al contenido de la elaboración gráfica
Test del Dibujo de la Figura Humana de Elizabeth Münsterberg Koppitz (1995), cuyo margen de edad de aplicación es entre los 5 y 12 años, de forma individual o colectiva y sin tiempo límite de realización.
La escala se divide en los siguientes dominios
impulsividad
inseguridad
ansiedad
timidez
agresividad
de acuerdo al rango de respuestas y la clasificación percentilar de la siguiente manera: leve: 1-5 puntos, moderado: 6-10 puntos, y grave: 11-15 puntos.
los niños y niñas desplazados víctimas del conflicto sociopolítico, experimentan una elevada carga de ansiedad que no alcanza a ser tramitada y provoca reacciones de inseguridad, cuya connotación de “timidez” ante los nuevos ambientes, indica la incertidumbre ontológica a la que se ven expuestos.
la agresión en los niños y niñas debe ser considerada como el determinante característico de la actitud del Yo en cuanto posibilidad de controlar el mundo interno y externo, a través de mecanismos como la represión, la sublimación, el olvido y el autocontrol emocional; dicho esto “mientras los adultos pueden sufrir un entumecimiento psíquico y borrar el recuerdo
IMPORTANTES CONSIDERAR
la agresividad como una respuesta natural ante la presión de estímulos endógenos y exógenos, que al volverse gradualmente inmanejables desbordan las posibilidades del niño para contener ciertos impulsos agresivos propios de la naturaleza humana;
la proyección es necesaria para descargar la presión en el Yo, pues en muchos sentidos “el niño mediante el dibujo registra su estado emocional en el momento, de modo que puede ser tanta su agresividad que llegaría a rasgar el papel o simplemente haría un rasgo dentro del dibujo que nombre su estado”.
SLa violencia entre los padres, la represión obligatoria de la memoria y el olvido forzado, instauran en los infantes frustraciones manifiestas y preocupaciones latentes, derivadas de la intranquilidad de quienes ayudan a la consolidación de su principio de realidadubtopic
En la proyección realizada por el niño desplazado se debe tomar en cuenta que éste aún no cuenta con las herramientas psicológicas para hacer frente al trauma de guerra y la incertidumbre ante el futuro, por lo que no logra defenderse como lo haría un adulto, y conspira con la tragedia, volviéndola parte de sus fantasías y ensoñaciones.
La familia como la comunidad, deben retomar los patrones de crianza positivos, la conservación de los elementos socioculturales adscritos a la tradición oral, el ejemplo positivo de los roles, las creencias religiosas, y la solidaridad como elementos de sostén propios de las habilidades enseñadas y puestas en práctica con el fin de procesar la angustia y las crisis sociales.
la relación y continuidad de las estructuras familiares, alterando todo contacto emocional del niño con su entorno y de cada uno de sus integrantes consigo mismo y con otros
propiciando un desajuste importante en la continuidad de su desarrollo.
la memoria histórica
las actividades lúdicas
espacios afectivos de encuentro