PRUEBAS DE FUNCIÓN HEPÁTICA
Las “pruebas de función hepática” consisten en la medición en sangre de la concentración de bilirrubina y de la actividad de ciertas enzimas presentes en el hígado (denominadas GOT, GPT, FA y GGT).
HIPERBILIRRUBINEMIA
La hiperbilirrubinemia consiste en un aumento de la concentración de bilirrubina en sangre, que puede o no acompañarse de otras alteraciones de las pruebas de función hepática según el proceso en cuestión; cuando es de suficiente intensidad da lugar a una coloración amarillenta de la piel y las mucosas denominada “ictericia”.
La bilirrubina es un producto de desecho (concretamente, procede de la degradación de los glóbulos rojos, degra-dación de la cual surge en primera instancia la bilirrubina indirecta “o “no conjugada”) que el hígado se encarga de eliminar por la bilis al intestino.
La producción de bilirrubina se ve incrementada en todos aquellos procesos que cursan con un aumento de la destrucción de glóbulos rojos, como la hemólisis entre otras entidades
PATRÓN DE CITOLISIS
En este caso se produce un aumento en sangre de las transaminasas principalmente: AST y ALT. La aspartato aminotransferasa (AST o GOT) y la alanina aminotransferasa (ALT o GPT) son enzimas cuya función es transferir moléculas llamadas "grupos amino".
Los aumentos moderados de transaminasas, en cambio, pueden obedecer tanto a enfermedades hepáticas como extra hepáticas.
PATRÓN DE COLESTASIS
El patrón de colestasis se caracteriza por un aumento de la fosfatasa alcalina (FA) y de la gamma-glutamil transpeptidasa (GGT) (que por ello se denominan “enzimas de colestasis”) con o sin un aumento asociado de bilirrubina.
PUNTOS CLAVE
1- La bilirrubina es un producto de degradación de los glóbulos rojos que el hígado se encarga de eliminar. 2- Las transaminasas son enzimas cuya elevación en sangre indica destrucción de las células que las contienen.