Captura de carbono

Captura

Precombustion

Gasificar el carbon

Separar el hidrogeno

El monóxido de carbono se hace reaccionar con agua para producir dióxido de carbono e hidrógeno, que puede utilizarse de nuevo tras su separación como combustible

El dióxido de carbono se almacena

Postcombustion

los gases de combustión son tratados con amoníaco o rocas calizas para fijar los óxidos de:

azufre y nitrogeno

y posteriormente se fija el CO2 con sustancias químicas como las aminas, que al regenerarse generan una corriente rica en CO2

Oxicombustion

eliminar del aire el nitrógeno y que el comburente sea muy rico en oxígeno (95-99%)

El gas de combustión muy rico en CO2 y sin óxidos de nitrógeno se seca y purifica para eliminar el vapor de agua y las partículas

El CO2 obtenido hay que comprimirlo para transportarlo al punto de almacenaje subterráneo

La separación previa del nitrógeno del aire para obtener oxígeno puro es un procedimiento muy costoso energéticamente:

hay que enfriar y comprimir el aire hasta licuarlo y después hacer una destilación fraccionada para separarlos

Transporte

El coste de la CAC para la Comisión Europea oscila entre 30 y 100 euros por tonelada de CO2 almacenada, dependiendo de la tecnología utilizada y del combustible.

Para la Agencia Internacional de la Energía, el coste medio es de 40 euros por tonelada no emitida en el caso de centrales de carbón y de 80 euros para centrales de gas.

Más del 80% del coste radica en el proceso de captura, dependiendo del coste del transporte (modo de transporte: barco o gasoducto y distancia al almacén geológico).

Almacenamiento

La inyección de CO2 en el subsuelo se utiliza como técnica madura desde hace 40 años para la recuperación mejorada de yacimientos de gas o de petróleo cercanos al agotamiento

La gran mayoría de la veintena de proyectos de demostración de la CAC existentes en la actualidad en el mundo se utilizan en la industria del petróleo y el gas

Pero no hay gran experiencia en el almacenamiento geológico del carbono y persisten las dudas sobre la posibilidad de fugas y los impactos ambientales, así como la estabilidad sísmica del emplazamiento

La sismicidad inducida en el proyecto de almacenamiento de gas en el subsuelo marino en el proyecto Castor frente a Vinarós (Castellón), con más de 600 sismos en septiembre-octubre de 2013, alguno con magnitud de 4,2 es un ejemplo de lo que podría suceder en la CAC