PREPARÁNDONOS PARA VIVENCIAR EL TIEMPO DE
ADVIENTO Y NAVIDAD

Pasado

Venida histórica a Palestina. Recordar el pasado, celebrar y contemplar el
nacimiento de Jesús en Belén.

Presente

Venida sacramental, se trata de vivir en el presente de nuestra vida diaria la "presencia de Jesucristo" en nosotros y, por nosotros, en el mundo.

Futuro

Venida gloriosa al fin del mundo, se trata de prepararnos para la Parusía o segunda venida de Jesucristo en la "majestad de su gloria".

Revisión

Tiempo de reflexión, para pensar en qué tan buenos hemos sido hasta ahora y lo que vamos a hacer para ser mejores que antes. Siempre es bueno hacer un alto para ver nuestra vida espiritual.

Proyección

Hacer un plan para ser buenos siempre y no solo en el Adviento. Analizar qué es lo que más trabajo nos cuesta y hacer propósitos para evitar caer de nuevo en lo mismo, luchando permanente.

Isaías

Anuncia cómo será el Mesías que vendrá. Sacude la conciencia del pueblo para crear en él actitud de espera. Exige pureza de corazón.

Juan El Bautista

Señala quien es el Mesías, que ya ha venido. Él mismo es modelo de austeridad y de ardiente espera.

María

Es la figura clave del adviento. En ella culmina la espera de Israel. Es la más fiel acogedora de la palabra hecha carne. La recibe en su seno y en su corazón.

Actitud de espera

El mundo necesita de Dios, la humanidad está desencantada y desamparada.

El retorno a Dios

La experiencia de frustración, de contingencia, de
ambigüedad, de cautividad, … y la necesidad de subir a Jerusalén como lugar de la morada de Dios, según los salmos de este tiempo.

Su fidelidad hace su verdadera historia e identidad.

La conversación

Con Cristo, el reino está cerca dentro de
nosotros.

Jesús es el Mesías

Será el liberador del hombre entero. Luchará contra todo el mal y lo vencerá no por la violencia, sino por el camino del amor.

La salvación pasa por el encuentro personal con Cristo.

Gozo y alegría

El reino de Cristo no es sólo algo social y externo, sino interior
y profundo.

La venida del Mesías constituye el anuncio del gran gozo para el pueblo.

Tiempo de limpiar

La mejor manera de preparar la venida de Jesús
es reflexionando, qué cosas me separan de Dios.

Teniendo un corazón limpio, estamos mucho mejor dispuestos para seguir con los preparativos.

Tiempo de ordenar

Es fácil volver a ensuciar la casa, si el tiradero, y el desorden no se quitan. De igual modo, es fácil volver a ensuciar el alma, si no se ordena las ideas, creencias y prioridades.

Recordaré las palabras de Jesús cuando le preguntaron cuál era el mandamiento más grande: "Amarás a Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas, y amarás a tu prójimo como a ti mismo".

Me sorprenderé al reflexionar, en cuántas cosas invierto mi tiempo, mi esfuerzo, mi vida y cuan poco tiempo invierto en cultivar mi oración, los sacramentos, las virtudes, el amor, el perdón ,entre otros.

Tal vez todos coincidamos en que lo segundo más
importante es hacer felices y hacer sentir amados a
aquellos que amamos.

Esta segunda semana de adviento escribiré las 5
cosas más importantes para mi salvación y qué
pienso hacer para lograrlas.

Tiempo de adornar

El alma se embellece con las virtudes. Cultivando las acciones buenas y las actitudes buenas, por ejemplo siendo sencillo, sirviendo, entre otros.

Esta tercera semana trataré de llenar mi alma de muchas obras buenas.

Tiempo de alegría

La más grande prueba de que Dios nos ama infinitamente, es haber mandado a su hijo Jesús al mundo para salvarnos.

El Adviento es entonces y sobretodo un tiempo de alegría profunda.

De igual manera mi vida debe ser también como un Adviento un poco más largo, una alegre espera de ese momento definitivo que me encontraré con el Señor para siempre.

La verdadera alegría cristiana, esa que trae una paz y serenidad que nadie puede quitar, sólo la tiene aquel hombre que logra escapar de si mismo, cuando ama a los demás y hace la voluntad de Dios.

Este Adviento trataré de vivir esta alegría, con una sonrisa, una palabra cordial, un pequeño elogio.

Venida histórica

Cuando nació en Belén hace dos mil
años.

Venida sacramental

Cuando hoy llega a cada uno de nosotros por su Divina Palabra, por su Iglesia, por los Sacramentos.

Venida escatológica

Cuando regrese con poder y majestad, al final de los tiempos, a este retorno se le llama Parusía.

"Corona de Adviento", que es un círculo de follaje verde, envuelta con un listón rojo y en cuyo centro se colocan 4 velas, para que la familia encienda una cada domingo de Adviento mientras hace oración.

Símbolos

El círculo

Simboliza la eternidad

Color verde

Simboliza la vida y la esperanza.

Listón rojo

Simboliza el amor de Dios que nos envuelve y también nuestro amor que espera con ansiedad el nacimiento del Hijo de Dios.

Luz de las velas

Simboliza nuestra fe.

Recordar y Celebrar El advenimiento, el nacimiento, llegada o venida del Señor. Las maneras como hoy, el señor sigue naciendo, como está presente y actúa en nuestra vida personal, familiar y en la sociedad.