DISEÑO INSTRUCCIONAL (DI) Y
DISEÑO TECNO-PEDAGÓGICO (DTP)
EN EDUCACIÓN

Teorías del aprendizaje –tanto descriptivas como prescriptivas-: Conductismo, Constructivismo, Conectivismo. Fuerte relación con las TIC (Driscoll,2005). 

Creatividad propia del diseño de recursos didácticos.

Ampliar la visión y crear una “science-style discipline”

El concepto Diseño Instruccional (DI) lo inició la Association for Educational Communication and Technology en 1963 (Reiser y Dempsey, 2012), haciendo hincapié en el diseño y el mensaje como instrumento de control del proceso de aprendizaje. Poco a poco, la fase de diseño fue desarrollándose en distintos niveles: Actuación, Planificación, Producción, Selección, Uso y Gestión. Estos se convertirían en el sustento para la sistematización del proceso concebida por el concepto DI (Guàrdia y Maina, 2012). 

La diferencia entre los tres radica solo en pequeños matices.

Visión actual pensando en el diseño instruccional desde una perspectiva que incluya las TIC como parte de la estrategia y de los criterios de decisión que determinan tanto el proceso como el producto instruccional final (Vázquez, Vite y Contreras, 2012). El concepto actual se aproxima, por tanto, a la noción de Diseño Tecnopedagógico, teniendo presente el aprovechamiento de las TIC para la mejora educativa (Gros y Nogera, 2013). 

La evolución del DI al DTP está condicionada por muchas variables: posicionamientos epistemológicos, la calidad de la educación, estrategias institucionales y personales de quienes los aplican, evolución de la tecnología educativa, etc. Hoy hay tantos modelos como diseñadores.

Las propuestas y modelos son lineales, sistemáticos y descriptivos. Focalizados en objetivos de aprendizaje observables (Reiser, 2001). Ejemplo: Modelo ADDIE (Análisis, Diseño, Desarrollo, Implementación y Evaluación).

Sustentados en teorías de sistemas, más abiertos, buscan la participación de estudiantes (Reiser, 2001). Afectados por las tendencias de enfoques de enseñanza-aprendizaje. Ejemplo: 4C/ID

Heurísticos, basados en la teoría cognitiva y centrados en la comprensión de los procesos de aprendizaje, la práctica y la resolución de problemas (Reiser, 2001). Ejemplo: ASSURE (Analyze, State, Select, Utilize, Require, Evaluate).

No prescriptivos, sustentados en tesis constructivistas y de teorías de sistemas. Fases sistémicas, integradoras, cíclicas y con posibilidad de revisión del proceso (Reiser, 2001). Ejemplo: SOLE (Student-Owned Learning-Engagement) o LDSE (Learning Design Apoyo Environment).

A causa de la evolución global y la mayor incidencia de los planteamientos constructivistas (Guàrdia y Maina, 2012)..

Como el Basado en agencias (Schwier). Pese a todos, se sigue sin colocar al diseñador como líder del proceso de planificaición (Guàrdia y Maina, 2012)..

Desarrollo de las TIC y la enseñanza virutal exigen un mayor esfuerzo de planificación y el DTP adquiere más sentido que nunca. Los contextos adquieren una importancia muy grande y se proponen modelos de prototipación rápida. Conviven diferentes perspectivas. Ejemplos: ISD, ADDIE, modelos específicos por materias e iterativos o modelo MISA (Guàrdia y Maina, 2012)..

Los antecedentes del Diseño Instruccional (DI) son remotos y datan de la antigua Grecia, estando presente posteriormente en la educación escolástica y la educación conductista (transmisora y centrada en la enseñanza). A partir de las aportaciones de J. Dewey se produce un cambio de rumbo (se centra en el aprendizaje y práctica individual). Dewey supone un punto inflexión hacia la calidad, aunque él no cree en ningún método, sino en la capacidad adaptación docente.Posteriores enfoques sobre la enseñanza y el aprendizaje fructificarán en las teorías behaviorista, cognitivista y constructivista, que influirán de manera decisiva en la concepción y modelado de las teorías del diseño instruccional y del diseño tecnopedagógico (Guàrdia y Maina, 2012).

La de los diseñadores sigue siendo una profesión poco reconocida, pero necesaria, más si tenemos en cuenta la escasa formación e interés del profesorado en materia pedagógica y uso de las TIC.Se hace necesaria la existencia de diseñadores preparados para ejercer en contextos presenciales y, sobre todo, de educación en línea. Estos diseñadores han de ser capaces de identificar el enfoque más apropiado en función del contexto, sin encasillarse en uno en concreto. Para ello, se requiere un cambio de cultura que permita a los diseñadores liderar un cambio real.El Diseño Instruccional (DI) debe convertirse en una ciencia dada su papel fundamental en el éxito de la educación a distancia actual.El futuro no se entiende sin las TIC, que darán protagonismo a la educación no formal. En este contexto, la evolución y adecuación del Diseño Tecnopedagógico necesita de reconocimiento tanto científico como profesional y la reorientación de la profesión y de su rol en el seno de las universidades (Guàrdia y Maina, 2012).

Hay que tener presentes aspectos como el Diseño Instruccional, el Diseño Gráfico, el Diseño Web, las Teorías del Aprendizaje, las Ciencias de la Educación o el Diseño de Software (Guàrdia y Maina, 2012).

Relacionados con las necesidades diseño y de aprendizaje actuales en un mundo mediado por las TIC.

Como por ejemplo el enfoque de Richey que recoge seis dominios clave: Los estudiantes y los procesos de aprendizaje; Los contextos de aprendizaje y actuación; La estructura del contenido y la secuencia; Las estrategias formativas y no formativas; Los medios tecnológicos y de distribución; y Los diseñadores y procesos de diseño.Merril propone un ciclo de 4 Fases de la Acción Formativa (Integración, Activación, Aplicación y Demostración.Por su parte, Conole (Mor y Craft, 2012) destaca el impacto de las TIC en las instituciones y los procesos de aprendizaje y propone un marco sobre las características del aprendizaje (Pensar y reflexionar; Experiencia y actividad; Evidencia y demostración; Comunicación e interacción).

Ante el nuevo paradigma tecnológico, diversos estudiosos apuestan por no crear nuevos modelos, sino establecer marcos conceptuales de diseño para guiar al los diseñadores en su proceso de creación y toma de decisiones. Un ejemplo de ello lo toma el clásico modelo ADDIE como elemento funcional del ISD.Pese a sus ventajas e inconvenientes, el enfoque sigue siendo importante y valioso en nuestros días, aunque carece de sentido una dependencia total al mismo y seguir cada paso de forma detallada (Guàrdia y Maina, 2012)..