Elementos de la Atención
a la Diversidad
Cultura Inclusiva
La discriminación se debe dejar de lado para
llegar a una verdadera inclusión.
Deben crearse espacios en la sociedad y en los entornos
educativos donde se fomente la participación activa de
todas y todos, donde sean escuchados y potenciadas
sus habilidades.
La diversidad debe ser la premisa en los ambientes educativos, ya que a partir de la diferencia, se pueden
adquirir más y valiosos aprendizajes.
No se debe minimizar a nadie ni mucho menos excluir a nadie
bajo ninguna circunstancia, al contrario, se deben redoblar esfuerzos donde cada quien pueda expresarse y manifestar
sus gustos e intereses.
Políticas Inclusivas
Parten del reconocimiento de
particularidades y características
específicas.
Se debe garantizar todos los derechos
sin importar entornos, intereses ni realidades
socioculturales.
Desde la carta magna se hallan los
artículos 13, 44, 47 y 67 donde se reconoce
a la educación como ese agente transformador
encargado de eliminar barreras y brechas.
En cuanto a diversidad e inclusión, el decreto 1421 de 2017
es en donde se encuentran aspectos referentes a este
contexto desde un punto de vista educativo.
La ley 1804 de 2016, da aportes pertinentes y relevantes
frente al tema de la inclusión desde el marco del enfoque
diferencial en la primera infancia.
Prácticas Inclusivas
La igualdad de oportunidades es fundamental
para que exista una verdadera inclusión y se
eliminen barreras.
Se deben elaborar currículos flexibles donde
todas y todos tengan una participación
activa y acorde a sus particularidades.
La atención debe brindarse de manera
integral e interdisciplinar, propendiendo por el bienestar
de las niñas y los niños en todos los contextos.
Formar y sensibilizar a los educadores convirtiéndolos
en esos dinamizadores y agentes de cambio en los espacios
de aprendizaje.
Se deben crear espacios adecuados y de fácil acceso
donde se puedan llevar a cabo acciones pertinentes de acuerdo a las particularidades e intereses hallados.