La vida docente me ha enseñado a:

Sentir y tocar, los corazones de mis estudiantes y sus familias.

Cada día soy más sensible a las situaciones personales de los niños y niñas.

Trabajar en equipo es indispensable; me importa el bienestar común.

El grupo docente es vital en mi labor diaria, por eso me gusta crear buenas relaciones.

Cada detalle es importante, la observación a los niños me permite conocerlos más y saber de sus intereses y gustos, especialmente en su juego libre.

En el campo docente, la observación es indispensable para conocer a nuestros compañeros y aprender a tener mejores relaciones laborales.

Físicamente; todo en nosotros mismos, habla de nuestro ser individual.

Aprender a observar es importante en la labor docente.

Aprender a escuchar; los niños expresan sus sentimientos, ideas y pensamientos.

Los compañeros de trabajo se convierten en compañía importante del diario vivir, ellos también crean grandes amistades y lazos especiales.

Mediante la habilidad de escuchar, puedo conocer historias especiales y necesidades importantes de mis estudiantes.

Lo que escucho me enseña a conocer las personas a mi alrededor. Y también me da la oportunidad de expresarme; que otras personas escuchen mis ideas y pensamientos.

He aprendido a conocer a mis estudiantes por su olor, es muy especial desarrollar esa habilidad.

Todos tenemos un olor particular. Eso nos hace realmente diferentes.

Con los niños también sucede algo especial en cuanto a los olores, Desde el olor particular de la mamá, hasta el olor de sus alimentos favoritos.

La actividad docente se puede explorar con actividades de texturas y olores; oler la comida, la naturaleza, un juguete, olores que se vuelven familiares y nos llevan a recuerdos especiales de nuestra infancia, o adultez.

Ser docente me convirtió en una mujer creativa; enseñar requiere mucha imaginación. Todo se puede explorar en el campo de la enseñanza.

Un día de picnic. para aprender sobre los grupos alimenticios; un día de chef, nos alegra y enseña a la vez.

Las clases se vuelven más vivenciales a través de la exploración de los sentidos. En el caso de probar, saborear o sencillamente enseñar el cuidado e importancia de los dientes; temas básicos en el aprendizaje.

Conocer los alimentos favoritos de nuestros estudiantes y compartir experiencias de sabor, color, olor, en fin. Millones de enseñanzas por medio de los sabores.