El texto aborda la evaluación e intervención en personas adultas que han sufrido un accidente cerebrovascular (ACV), diferenciando entre ACV hemorrágico e isquémico. En casos de ACV hemorrágico, se destacan síntomas como crisis epilépticas, dolor pulsátil, vómitos, aumento de la presión intracraneana y arterial, y disminución de los niveles de conciencia, que pueden llegar a estupor o coma.