によって Alejandra Pescina Murillo 3年前.
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La noción de cambio y de discontinuidad es una de las piezas claves de este modelo. La finalidad del modelo genealógico de análisis es estudiar los procesos sociales de larga duración, porque es en ellos donde verdaderamente se pueden percibir las regularidades, las repeticiones y los cambios.
El análisis genealógico de los artistas creadores, creativos, los públicos –compradores, consumidores, los objetos artísticos y los códigos de expresión e interpretación nos permiten hablar del arte como un campo socialmente instituido del que es preciso derivar sus funciones sociales, tanto las explícitas como las latentes. Las funciones sociales del arte no son por tanto unívocas, varían con las épocas y con las escuelas.
En este sentido todo arte es ideológico porque favorece los intereses de una determinada clase social, refleja la concepción del mundo de esta clase y reconoce tácitamente sus normas sociales y sus criterios de gusto
Walter Benjamin publicó en 1936 La obra de arte en la época de la reproducción técnica, donde expuso cómo la obra de arte perdía su aura con la aparición de la fotografía y el cine (Benjamin, 1973). Theodor W. Adorno fue un defensor de la libertad y autonomía del arte. En su obra Teoría Social (1970) destacó el doble carácter del arte como autónomo y como hecho social.
Bourdieu confiere al campo artístico una mayor autonomía que los modelos marxistas clásicos. Para Bourdieu, y con él para buena parte de los sociólogos del Centro de Sociología Europea de París, la cultura interviene en el proceso de dominación donde las diferencias culturales sirven para legitimar y perpetuar las diferencias de clase y, en último término, las diferencias económicas.
Lo más destacado del planteamiento de Bourdieu es que proporciona un modelo analítico en el que, a través del concepto de habitus relaciona las estructuras sociales con las simbólicas. El concepto de habitus es un concepto mediador que fue elaborado como reacción frente al estructuralismo que reduce el agente a mero titular. Sirviéndose de este concepto, Bourdieu trata de recuperar una cierta autonomía para los sujetos que el modelo estructuralista había excluido de su análisis.
1. Contenido temático primario o natural (fáctico y expresivo) que constituye el mundo de los modelos artísticos, y que no es en sí mismo parte de la descripción iconográfica sino que se sitúa en un nivel anterior denominado pre-iconográfico. Para llegar a este nivel, que es el primario, el espectador de la obra debe tener cierta familiaridad con los objetos representados. 2. Contenido temático secundario o convencional que constituye el mundo de imágenes, historias y alegorías. Este nivel es propiamente el llamado análisis icono-gráfico y para ser capaz de interpretarlo el espectador debe estar familiarizado con las fuentes literarias y las teorías estéticas. El segundo nivel es más complejo porque está relacionado con el significado convencional (reconocer que un hombre en la cruz es Jesucristo, por ejemplo).Una aproximación metodológica en el.. 3. El tercer nivel es la interpretación iconológica que se diferencia de la iconografía porque se interesa en el significado intrínseco o por decirlo de otra manera, de los principios subyacentes que revelan el carácter básico de una nación, una época, una clase social, una creencia religiosa . Esta tercera lectura se realiza de una manera correcta, si se conocen los códigos culturales de la época que estamos analizando.