Durante siglos, la humanidad ha intentado comprender la estructura del cosmos, dando lugar a dos teorías principales: la heliocéntrica y la geocéntrica. La primera, propuesta por Nicolás Copérnico, sostiene que el Sol es el centro del sistema planetario, una idea que fue ampliada por Johannes Kepler con su estudio del movimiento planetario, y por Isaac Newton con sus leyes de la gravedad.