GNOSIAS Y PRAXIS
GNOSIAS: Las gnosias son la capacidad de elaborar, interpretar y asignar un significado a la información captada por los distintos sentido del ser humano. Pontello (2005)
Existen gnosias simples y complejas
Gnosias simples, las primeras dependen de las sensibilidad especial por lo tanto son percepciones simples dependiendo cada uno de los sentidos. Las percepciones complejas son percepciones simples integradas en percepciones complejas.
gnosias complejas:
Gnosias visuo-espaciales. Reconocimiento de colores, formas geométricas, planos, rostros, orientación espacial y distancias, entre otros. Nuestra anatomía biocular (dos ojos) permite obtener una imagen en tres dimensiones, incorporando el concepto de espacio a la interpretación de la información.
Gnosias táctiles complejas. Para este proceso se necesita tanto las gnosias sencillas como la actividad muscular de los dedos y la información relativa a nuestro propio cuerpo (propiocepción), de manera que tenemos que ser conscientes de la extensión de nuestro dedo para saber en qué momento comienza el objeto que estamos tocando.
Somatognosia: esquema corporal. Conocimiento y reconocimiento de las diferentes partes del cuerpo y de su posición en el espacio. Es un proceso gradual donde se van incorporando o excluyendo gnosias de diversos tipos. Supone la organización de las gnosias relativas a la propiocepción, al equilibrio (táctiles, visuo-espaciales), a la visión, etc. El esquema corporal varía según la zona y por tanto, las gnosias son diferentes según el área. La percepción de los dedos no es la misma que la de la espalda, por ejemplo.
Las Gnosias simples:
Gnosias auditivas. Capacidad de reconocer el sonido, el ruido, la música, el habla, etc. y atribuirle significado.
Gnosias gustativas. Capacidad de identificar, mediante las papilas gustativas, diferentes sabores.
Subtopic
Gnosias táctiles sencillas. Capacidad de identificar, a través del tacto, objetos, texturas, temperaturas, etc.
Gnosias visuales sencillas. Capacidad de reconocer información a través de los ojos: especialmente el color. Información como la forma o el reconocimiento de caras, se consideran complejas por incorporación de otros analizadores.
Gnosias olfativas. Capacidad de reconocer los olores como a perfume, a humedo, etc.
PRAXIAS
Según Tallis J y Soprano M (1991), “Las praxias son un sistema de movimientos coordinados en función de un resultado o de una intención” Esto quiere decir, que cualquier habilidad motora aprendida (adquirida) y planificada, con una finalidad y que, por repetición, termina por automatizarse. Cada vez que caminamos, comemos, nos vestimos o realizamos cualquier actividad que implique una coordinación motora, estamos desarrollando esta habilidad. Además, no sólo implica conocer el movimiento sino la información que necesitamos para llevarla a cabo: en qué orden se realizan los movimientos, qué objetos necesitamos y con qué finalidad, cómo se utilizan esos objetos, etc.
Las praxias se divide en tres partes diferenciadas: planificación: es la intención y estructuración de la acción.
Programación: es la organización de los movimientos necesarios.
Ejecución: es la realización.
Las praxias implican la recepción, a través de los sentidos, e interpretación de la información (percepción), sobre todo, la del espacio externo, pero también la de nuestro propio cuerpo, lo que se conoce como propiocepción.
las praxias se dividen en cuatro tipos:
1. Praxias ideomotoras, es la capacidad de realizar un gesto o movimiento sencillo, de manera intencionada, ante una petición verbal o imitación. Por ejemplo: responder un saludo (gestualmente), imitar una acción, poner cara de sorpresa… En este grupo se incluyen las praxias faciales (capacidad de realizar voluntariamente movimientos o gestos con diferentes partes de la cara).
2. Praxias ideatorias, es la capacidad de poner en marcha secuencias de gestos y el uso de objetos, conlleva el saber; para qué se usa el objeto, cómo cogerlo y el proceso para hacerlo (levanto el brazo, abro la mano, cierro la mano rodeando con los dedos el objeto, bajo el brazo…). Por ejemplo: coger un vaso de agua, abrir una puerta, cambiar de canal…
Praxias visoconstructivas, es la capacidad de planificar y realizar los movimientos necesarios para copiar un modelo, modelar o construir. Por ejemplo: dibujar, modelar plastilina, construir con bloques, hacer una receta…
QUE AREAS DEL CEREBRO ACTIVAN
Las áreas principales que intervienen en los movimientos son las del lóbulo parietal, encargado de la percepción espacial; el lóbulo frontal (corteza prefrontal, motora y premotora), como zona de control y movimiento, y los ganglios basales y el cerebelo, que son los encargados de registrar los movimientos automatizados.
Praxias ideomotoras. La corteza sensoriomotora primaria es la que se encarga de planificar los movimientos y los ganglios basales y el cerebelo están principalmente implicados en la ejecución de acciones automáticas, preaprendidas. La información pasa al tronco encefálico y de ahí a la médula espinal, que será la que envíe las órdenes a los músculos y los huesos para ejecutar el movimiento.
Praxias ideatorias y visoconstructivas Existe un circuito parietofrontal que integra información sensoriomotora específica, y cuya función es la de transformar la información sensorial en información necesaria para el movimiento. Conecta, por tanto, la corteza frontal, reguladora de la atención y el control y la corteza parietal superior, que comprende múltiples áreas que están implicadas en el análisis de la información sensorial (información visual, auditiva, vestibular, somatosensorial, etc.).
AREAS DEL CEREBRO QUE ACTIVAN
Las áreas cerebrales que se activan en las gnosias; son aquellas que registran e interpretan la información perceptiva, es decir, las áreas asociadas a la visión, el olfato, el gusto, el tacto y la audición.
Los ojos, los oídos o la piel son receptores sensoriales de los estímulos externos. Estos receptores transforman la señal en impulsos eléctricos que mandan a sus respectivas cortezas primarias, donde se reconoce la información, esto se enviará a las áreas de asociación donde todas las características del objeto se aunarán para conformar significado. Además, se asociará con experiencias pasadas, con objetos similares ya conocidos, con emociones que nos evocaron anteriormente situaciones parecidas
GNOSIAS VISUALES: En las gnosias visuo-espaciales, la información se asocia con la recibida del lóbulo parietal (información espacial), de ahí que el área de asociación parietoccipitotemporal sea tan importante: el lóbulo occipital proporciona la información visual; el lóbulo parietal, la espacial, y el lóbulo temporal, la memoria episódica (de los acontecimientos) y semántica (del conocimiento), dotando a los estímulos de significado, proceso denominado como percepción.
GNOSIAS AUDITIVAS. Lóbulo Temporal
GNOSIAS TÁCTILES: Lóbulo parietal
El sistema somatosensorial procesa información acerca del tacto, la posición, el dolor y la temperatura, de ahí que se localice en el lóbulo parietal, íntimamente ligado con lo espacial, y que esté próximo a las cortezas motoras, el olor como el sabor se procesan de manera distinta, situándose, cerebralmente, en capas subcorticales (por debajo de la corteza) y próximos a la amígdala, centro de las emociones.