El ABC del duelo

Se evade la concepción del morir

No se educa para el dolor

Se busca el placer y se niega o se trata de reemplazar el dolor

Es necesario afrontar que la muerte hace que la persona ya no este con nosotros

El duelo es tan natural como el llorar

El dolor es real, existe y se debe vivir

El dolor toma su tiempo superarlo

Los acompañantes del doliente deben ayudarle a no disfrazar el dolor sino a asimilarlo y superarlo

Al inicio es doliente necesita hablar y llorar, para desahogarse

Las lagrimas lavan el espíritu y abren el caudal del dolor

Aceptar la realidad de la pérdida

Trabajar las emociones y el dolor de la pérdida.

Adaptarse a un medio en el que el fallecido está ausente.

Recolocar emocionalmente al fallecido y continuar viviendo

El dolor se vive internamente y es muy difícil definirlo, describirlo

Un sujeto con dolor o pérdida

Una persona que tiene o padece una pérdida

El dolor no es ajeno a la condición humana

Entonces dijo Dios: hagamos a los seres humanos a nuestra imagen, según nuestra semejanza» (Gn 1,26 a),

«Y creó Dios a los seres humanos a su imagen, a imagen de Dios los creó; varón y mujer los creó» (Gn 1,27).

la persona es una unidad, un todo que guarda un valor intrínseco, el ser imagen del Creador

Ontológicamente

Axiológicamente el hombre es el valor más alto de la creación

proceso que necesita tiempo para provocar un cambio positivo.

Jesús es el mejor acompañante del doliente

Jesús provoca cambios en nuestro interior

la experiencia de rezar la persona podrá experimentar la presencia de esa fuente, que refresca y revitaliza la vida

Al rezar entramos en sintonía con el Espíritu santo

Preguntas humanas o existenciales

¿Por qué me pasa esto?
¿Por qué a mí?

¿Cómo puedo enfrentar esto?
¿Cómo supero este vacío?

¿Es posible seguir viviendo así?
¿Qué hice yo para merecer esto?

¿Qué puedo hacer con lo que siento?

Preguntas con matices religiosos

¿Dónde está Dios?

¿Qué clase de Dios permite que me pase esto?

Dios, ¿existe?

Se debe asumir la nueva condición por la perdida y el dolor de la misma

Se acompaña al doliente desde la psicología y la espiritualidad

Estar en duelo es propiamente un estado sufriente pasivo, víctima del sufrimiento

hacer el duelo es el proceso activo de recuperación integral de la persona en todas sus dimensiones

Caminar hacia la sanación física y espiritual demanda de tareas

Tarea I:
Aceptar la realidad de la pérdida

Tarea II:
Trabajar las emociones y el dolor de la pérdida

Tarea III:
Adaptarse a un medio en el que el fallecido está ausente, o la pérdida sufrida deja un vacío

Tarea IV:
Recolocar emocionalmente, al que se ha ido o al fallecido, en un lugar del corazón y continuar vivienda

aporta una oportunidad, tanto para la persona que se encuentra padeciendo la enfermedad como a los que le asisten, sus familiares y su entorno

la posibilidad es la de prepararse adecuadamente para la última acción de su vida, morir, y para los demás

estar en condiciones de acompañar en ese acto trascendental

Espiritualidad

Vivir desde el espíritu y en fraternidad

Vivencia espiritual que debe ser desde la fe

Trabajo de duelo respetando tiempos y sanando heridas

Acompañamiento psicoespiritual que no es hacer terapia

Proceso de duelo que es el tiempo donde se ve las etapas del duelo

Duelo

fenómenos que ocurren en nuestro interior cuando tenemos una pérdida, y no es fácil definir este concepto porque involucra muchas variables a tener en cuenta

PENA, TRISTEZA, AFLICCIÓN

Interesante ver la relación entre psicología, filosofía y espiritualidad

Recordarnos que el dolor es mejor asumirlo y no evadirlo

El apoyo que necesita el doliente

Nuestra fe es importante y Jesús es nuestro amigo fiel, por quien servimos a los demás

Diácono permanente de Racagua

Casado, y padre tres hijos

Profesor,

Acompañante de profesores

En el colegio Marista de Chile

Obispo de la Diócesis de Arica

Amplia experiencia laboral y pastoral

Percibe , siente, entiende

Aprende a renunciar

Acepta situaciones diferente de alegría y dolor

Existe la experiencia extrema de la agonía

que afecta a los espectadores y al agonizante

Muestra la fragilidad humana Gn 2,7

En la ancianidad es deseada Job5,26

El ruah se aleja de él e ingresa al sheol, reino de los muertos

Fuerza vital que abandona al hombre

Muerte en el Nuevo Testamento

Concepción teológica de la muerte

Esperanza de resurrección como Cristo

Muerte de jesús como fundamento ante nuestra muerte

Nuestra vida toma un sentido divino

Amor de Dios incondicional

Se vive el presente y se desestima la reencarnación

corresponden a un modelo psicológico de los procesos de duelo

corresponden a un modelo psicológico de los procesos de duelo

es el el modelo de J. William Worden

El duelo es el complemento de las actividades

Perfil de un aompañante

Tener tiempo. Olvidar las frases cliché. Respetar al otro/a.

Proponer, no imponer. Estar a disposición de

Ser incondicional con…
No tener apuro y respetar el ritmo de

Ser delicado en la escucha.
No obligar, despertar la libertad del otro.

Sentimientos que se experimentan en un duelo

Tristeza, enfado o rabia,

Inseguridad, ansiedad, apatía e indiferencia

impotencia, soledad, incredulidad

Sensaciones que se experimentan en un duelo

1. Vacío en el estómago.
2. Opresión en el pecho.
3. Opresión en la garganta.

4. Hipersensibilidad al ruido.
5. Sensación de despersonalización: Camino calle abajo y nada parece real, ni siquiera yo.

6. Falta de aire.
7. Debilidad muscular.
8. Falta de energía.
9. Sequedad de boca

Conductas que experimenta el doliente

Sueño

Mala alimentación

evadir la realidad

Suspirar y lágrimas