Hábitos Atómicos

Ppios fiundamentales de por qué los pequeños cambios generan una gran diferencia

Los hábitos son el interés compuesto de la superación personal. Trabajar para lograr ser un 1% mejor cada día cuenta mucho a la larga.

Los hábitos son una espada de doble filo. Pueden trabajar a tu favor o en contra tuya. Por este motivo, entender los detalles es indispensable.

Los pequeños cambios con frecuencia parecen no tener ningún efecto hasta que logras cruzar un umbral crítico. Los resultados más poderosos de alquier proceso acumulativo suelen retrasarse. Debes aprender a ser paciente.

Un hábito atómico es un pequeño hábito que forma parte de un sistema más complejo. De la misma manera en que los átomos son los ladrillos de las moléculas, los hábitos atómicos son los ladrillos de los resultados excepcionales.

Si quieres mejores resultados, olvídate de fijar metas. En lugar de eso, concéntrate en tu sistema.

No te elevas al nivel de tus metas. Desciendes al nivel de tus sistemas.

La manera en que tu ha´bitos moldean tu identidad (y viceversa)

Hay tres niveles o capas de cambios: el cambio de resultados, el cambio de proceso y el cambio de identidad.

La manera más efectiva de cambiar tus hábitos consiste en enfocarse no en lo quieres lograr sino en la persona en quien te quieres convertir.

Tu identidad surge de tus hábitos. Cada acción es un paso a favor o voto por la persona en quien te quieres convertir.

Para que logres convertirte en la mejor versión de ti mismo, es necesario que constantemente revises y corrijas tus creencias y que actualices y expandas tu identidad.

La verdadera razón por la cual los hábitos importan no es porque te ayuden a alcanzar mejores resultados (aunque, por supuesto, pueden hacerlo), sino porque son capaces de
hacerte cambiar tus creencias acerca de ti mismo y ayudarte a construir una nueva identidad

Cómo construir mejores hábitos en 4 senciallos pasos

Como mantener los buenos hábitos todos los días

Uno de los sentimientos más satisfactorios es el sentimiento de estar progresando.

Un historial o registro de hábitos es una manera simple de medir si realizaste o no un hábito —como marcar con una equis un espacio en un calendario.

Los registros de hábitos y otras formas visuales de medir pueden hacer que tus hábitos sean satisfactorios al proveer evidencia clara de tu progreso.

No rompas la cadena. Trata de mantener tu hábito en una racha continua que no se detenga.

Nunca dejes de hacer algo dos veces. Si dejas de realizar tu hábito un día, recupera el ritmo tan rápido como sea posible.

Solo porque puedas medir algo, no significa que ello sea lo más importante.

Como un socio corresponsable puede cambiarlo todo

La inversión de la Cuarta Ley del Cambio de Conducta es hacerlo insatisfactorio.

Es menos probable que repitamos un mal hábito si este es doloroso e insatisfactorio.

Un socio corresponsable puede crear un costo inmediato para nuestra inactividad. Nos importa mucho lo que otros piensan de nosotros y no queremos que los otros nos tengan en un mal concepto.

Un contrato de hábitos puede ser usado para añadir un costo social a cualquier conducta. Esto hace que el costo de violar tus promesas sea público y doloroso.

Saber que alguien nos está observando puede ser un motivador muy poderoso.

Conclusión

El secreto para alcanzar resultados que duren

Hay una antigua parábola griega conocida como la paradoja de sorites,* que se refiere al efecto que una pequeña acción puede tener cuando se repite suficientes veces. Una formulación de la paradoja es como sigue: ¿Puede una moneda volver rico a alguien? Si le das a una persona una pila de diez monedas, no podrías afirmar que es rica. Pero ¿qué pasa si añades otra pila? ¿Y otra? ¿Y otra más? En algún momento, tendrías que admitir que tu vida se transformó gracias a un pequeño cambio.

Cada mejora equivale a añadir un grano de arena en el platillo positivo de la balanza, inclinando lentamente las cosas a tu favor. Eventualmente, si mantienes los hábitos, alcanzas un punto clave. De pronto parece más sencillo mantener los buenos hábitos. El peso del sistema está trabajando para ti en lugar de hacerlo en tu contra.

Es notable el negocio que puedes construir si no dejas de trabajar. Es notable el cuerpo que puedes llegar a tener si no dejas de entrenar. Es notable el conocimiento que puedes adquirir si no dejas de aprender. Es notable la fortuna que puedes llegar a amasar si no dejas de ahorrar. Son notables las amistades que puedes construir si no dejas de preocuparte por los demás. Los pequeños hábitos no se suman. Los pequeños hábitos se componen. Ese es el poder de los hábitos atómicos. Pequeños cambios. Resultados notables.

Pequeñas lecciones de las cuatro leyes

Modelo

Fase del problema

Señal

Anhelo

Fase de la solución

Respuesta

Recompensa

La felicidad es simplemente la ausencia de deseos

La felicidad no consiste en alcanzar placer (lo cual es alegría o satisfacción), sino en una falta de deseo. La felicidad llega cuando no sientes la urgencia de sentirte de manera distinta. La felicidad es el estado en el que entras cuando ya no quieres cambiar de estado.

Es la idea de placer lo que perseguimos. Buscamos la imagen del placer que generamos en nuestras mentes

Esto es lo que el neurólogo austríaco Victor Frankl quería decir cuando afirmó que la felicidad no puede perseguirse, tiene que surgir. El deseo se persigue. El placer surge a partir de la acción.

La paz ocurre cuando dejas de convertir tus observaciones en problemas.

El anhelo se trata de querer arreglarlo todo. La observación sin anhelo es el reconocimiento de que no necesitas arreglar nada.

Simplemente estás observando y existiendo.

Propósito...

Friedrich Nietzsche, filósofo y poeta alemán, escribió: «Aquel que tiene un porqué por el cual vivir, puede soportar casi cualquier cómo». Esta frase abriga una importante verdad acerca del comportamiento humano.

Si tu motivación y deseos son lo suficientemente grandes (esto es, tu porqué está actuando), te pondrás en acción aun cuando sea muy difícil. Los grandes anhelos promueven grandes acciones, a pesar de que la resistencia sea dura.

Decisiones.....

Es el deseo, no la inteligencia, lo que provoca una conducta. Como dice Naval Ravikant: «El truco para hacer cualquier cosa consiste en cultivar primero un deseo por esa cosa».

Todas las decisiones son emocionales de alguna manera. Sean cuales sean tus razones lógicas para realizar una acción, tú solamente te sientes motivado a actuar debido a una emoción.

Esta es la razón por la que el anhelo se da antes que la respuesta. El sentimiento se da primero, y luego la conducta.

Solo podemos ser racionales después de haber sido emocionales. El modo primario del cerebro es el sentimiento, el modo secundario es el pensamiento.

Tu respuesta tiende a seguir tus emociones. Nuestros pensamientos y acciones están enraizados en lo que encontramos atractivo, no necesariamente en lo que es lógico

Si un tema hace que alguien se sienta emocional, es improbable que ese alguien se interese en los datos. Este es el motivo por el cual las emociones pueden ser una amenaza tan grande cuando se trata de tomar decisiones.

la mayoría de la gente cree que la respuesta razonable es aquella que los beneficia, la que satisface sus deseos.

Progreso....

El sufrimiento dirige el progreso. La fuente de todo sufrimiento es el deseo por un cambio de estado. Esto también es la fuente de todo progreso.

Querer más es lo que empuja a la humanidad a buscar mejoras, desarrollar nuevas tecnologías y tratar de llegar más alto. Cuando sentimos anhelos, estamos insatisfechos pero determinados. Sin anhelos, estamos satisfechos, pero carecemos de ambición.

Tus acciones revelan cuánto deseas algo. Si afirmas que algo es una prioridad, pero nunca
actúas en consecuencia, entonces significa que no lo quieres realmente.

La recompensa solo aparece después de haber gastado la energía.

Satisfacción....

Resistir la tentación no satisface nuestros anhelos, solamente los ignora. Crea un espacio para dejar pasar nuestros anhelos. El autocontrol requiere que te deshagas de un deseo en lugar de satisfacerlo

El vacío que existe entre nuestros anhelos y nuestras recompensas determina cuán satisfechos nos sentimos después de realizar una acción.

Cuando gustar y querer son aproximadamente equivalentes, te sientes satisfecho.
Satisfacción = Gustar – Querer

Si lo que quieres supera lo que te gusta, siempre estarás insatisfecho. Estarás poniendo más peso en el problema que en la solución perpetuamente.

Expectativas....

El dolor que produce el fracaso es directamente proporcional al tamaño de las expectativas. Cuando el deseo es alto, duele mucho cuando no te gusta el resultado. Fracasar en obtener algo que quieres duele más que fracasar en obtener algo en lo que no piensas demasiado.

La manera en que sentimos influye en nuestra manera de actuar, y nuestra manera de actuar influye en nuestra manera de sentir.

El deseo y el anhelo son lo que inicia una conducta. Pero si no es disfrutable, no tienes ninguna razón para repetirla. El placer y la satisfacción son lo que mantiene una conducta. Sentirte motivado es lo que hace que actúes.

Empiezas a comprender cómo funciona el proceso y tu esperanza gradualmente se transforma en una predicción más precisa y en la aceptación del resultado más probable.

Los planes nuevos ofrecen esperanza porque no tenemos experiencias que nos permitan anclar nuestras expectativas en la realidad.

Aristóteles: «Es fácil decepcionar a la juventud porque la juventud es rápida para tener esperanzas».

Tal vez esto podría actualizarse y expresarse como:

«Es fácil decepcionar a la juventud porque la juventud solo tiene esperanzas». Los jóvenes carecen de la experiencia necesaria para anclar sus expectativas. Al principio la esperanza es todo lo que tienes.

Tácticas avanzadas, como pasar de ser bueno a ser verdaderamente grandioso

La verdad acerca del talento (Cuándo lo genes importan y cuando no)

El secreto para maximizar tus probabilidades de éxito es elegir el campo correcto de competencia.

Elige el hábito apropiado y el progreso se vuelve sencillo. Elige el hábito incorrecto y la vida se vuelve una batalla.

Los genes no pueden cambiarse, lo que significa que nos brindan una poderosa ventaja en
condiciones favorables y una seria desventaja en circunstancias desfavorables.

Los hábitos son fáciles cuando son compatibles con tus habilidades naturales. Elige los hábitos que mejor se amoldan a ti.

Participa en un juego que favorezca tus fortalezas. Si no puedes encontrar un juego que te favorezca, crea uno nuevo.

Los genes no eliminan la necesidad de trabajar duro. Determinan y muestran lo que hay que hacer. Nos dicen en qué debemos trabajar duro.

La regla de ricitos de oro: Como mantenerse motivado en la vida y el trabajo

La Regla de Ricitos de Oro establece que los humanos experimentamos el máximo de motivación cuando trabajamos en tareas que están justo en el borde de nuestras habilidades actuales.

La más grande amenaza al éxito no es el fracaso, es el aburrimiento.

Conforme los hábitos se convierten en rutina, se vuelven menos interesantes y menos satisfactorios. Nos aburren

Cualquiera puede trabajar cuando se siente motivado. Es la habilidad de seguir adelante cuando el trabajo no es emocionante lo que hace la diferencia.

Los profesionales mantienen un horario, los aficionados dejan que la vida se entrometa en el camino.

El inconveniente de crear buenos hábitos

La ventaja de los hábitos es que podemos hacer cosas sin pensar. La desventaja es que podemos dejar de poner atención en los pequeños errores.

Hábitos + Práctica deliberada = Maestría

La reflexión y la revisión son procesos que te permiten permanecer consciente de tu desempeño a lo largo del tiempo.

Entre más nos apegamos a una identidad, más difícil se vuelve crecer más allá de ella

TABLA RESUMEN como crear un buen hábito y como eliminar uno malo