6 Sombreros para pensar

Sombrero Rojo

Legitima las emociones y los sentimientos como una parte importante del pensamiento

Intuición y presentimientos

Emociones y sentimientos

Sombrero Negro

Se ocupa del pensamiento negativo

Señala lo que está mal lo incorrecto y lo erróeo

Este es el sombrero de la precaución: el que nos aleja de lo ilegal, de lo inútil, de lo peligroso, de lo contaminante y de todas acciones cuyos efectos puedan causarnos un perjuicio.

Sombrero Blanco

Hechos y cifras

Es neutral y objetivo

Hechos y verdades Filósoficas

el pensador se esfuerza para ser mas neutral y más objetivo al presentar la información

Sombrero verde

El sombrero verde permite plantear “posibilidades” en cuya ausencia es imposible progresar.

El pensador busca avanzar a partir de una idea para empezar otra .

Pensamiento creativo y lateral.

El sombrero verde es una invitación a explorar continuamente alternativas, incluso cuando las cosas parecen funcionar bien.

Sombrero Azul

Define los temas hacia los que debe dirigirse el pensamiento

representa la capacidad de enfocar, cualidad que diferencia al buen pensador del mediocre.

El sombrero del control, que permite organizar el pensamiento.

Sombre Amarillo

El sombrero amarillo son esos destellos de esperanza que emanan de mirar las cosas con optimismo.

Positivo y constructivo

Es optimista y cubre la esperanza y el pensamiento positivo

Es neutro y objetivo. el se ocupa de hechos objetivos y de cifras

El verde representa vegetación y crecimiento fértil , e indica creatividad e ideas nuevas

Se centra en los aspectos no racionales del pensamiento. A través de él, se genera la oportunidad de expresar las emociones, los sentimientos y las intuiciones sin necesidad de explicarlos o justificarlos.

Si algo no encaja en nosotros, porque no se ajusta a nuestros recursos, a nuestros valores, a nuestra política o a nuestras características personales, el sombrero negro es el espacio para señalarlo.

El pensamiento del sombrero amarillo debe ir más allá y estar fundado en un esfuerzo consciente por encontrar una base lógica que apoye y refuerce el optimismo planteado, sin que eso signifique que cada punto requiera una justificación completa y exhaustiva.

Por otra parte, cuando se piensa con el sombrero azul se intenta dar una visión general de lo que ha ocurrido y de lo que se ha logrado, con el fin de imponer orden en el aparente caos. Por ello, las recapitulaciones y los resúmenes de lo que se haya planteado forman parte de este tipo de pensamiento.