RECETA GENERAL MUFFINS

Precalentado del horno a 220°C

En un tazón mediano, combinar todos los ingredientes secos, primero la harina, el azúcar , bicarbonato de sodio y sal . Mezclar bien y dejar en un lado.

Se utiliza el método unitario de la mezcla solido con solido con la harina, el azúcar, bicarbonato de sodio y sal en la que se buscar formar un solo producto mediante la combinación de dichos ingredientes.

En un tazón grande, bate o mezcla con una cuchara de madera todos los ingredientes líquidos como el aceite , los huevos y la vainilla hasta que estén bien incorporados

Se utiliza la operación de mezcla líquido con líquido con el propósito de obtener un solo producto incorporando de manera homogénea cada ingrediente

Agregar la mezcla seca al tazón de la mezcla húmeda y bate hasta que estén incorporados.

Se utiliza la operación de mezcla solido con líquido para poder obtener la combinación final de los ingredientes previamente manejados.

Agregar los arándanos y mezclar de forma envolvente hasta lograr que todos los ingredientes estén incorporados en una mezcla homogénea.

Se utiliza la operación de mezcla semisólido con solido ya que previamente se obtuvo un amasado manejable y finalmente con esta combinación se obtiene el producto destinado a la cocción.

Engrasa un molde para muffins con aceite o coloca capacillos para muffins para evitar que se pegue la mezcla.

Vacía la mezcla a ¾ de capacidad del molde y hornea de 35 a 50 minutos a fuego medio-alto (180°C – 200°C) o hasta que un palillo de madera insertado cerca del centro salga limpio.

Utilizando el método de transferencia de calor y cocción para transformar de forma química y físicamente el aspecto, la textura, la composición y el valor nutrimental de los muffins por acción del calor con el objetivo de mejorar sus características organolépticas.

Enfría la charola de los muffins en una rejilla de alambre durante 15 minutos mínimo, luego retira suavemente cada uno de ellos con ayuda de una espátula y continúa enfriando completamente en la rejilla.

Se utiliza el enfriamiento con el objetivo de mejorar y extender su vida útil dejando a temperatura ambiente para permitir que la temperatura del producto disminuya y posteriormente usar la refrigeración.

Se comienza a elevar la temperatura del horno con el objetivo de destruir microorganismos, eliminar agua e inactivar sustancias tóxicas.