El término sofista proviene de la Antigua Grecia, especialmente de la Atenas democrática del siglo V a. C., en la que florecieron las primeras escuelas de filósofos naturales, conocidos como los sofistas o como los filósofos presocráticos (o sea, previos a Sócrates, el primer gran poeta de la antigüedad griega)
No es la fuerza la característica específica del legislador o autoridad
Un legislador debe tener inteligencia ante las necesidades de su comunidad y que con voluntad quiere un bien común.
Para ejercer el cargo de legislador y autoridad, debe cumplir con las dos cualidades anteriores. La fuerza es un auxiliar.
Calicles
Socrates
Protágoras
"El hombre es la medida de todas las cosas"
Cada uno tiene su propia verdad, y puede ser diferente a las demás.
Lo aceptable de su tesis: cada uno debe actuar según su propia conciencia, y sobrellevar la responsabilidad de su decisión.
Lo criticable en su tesis: indica que no hay ninguna instancia superior a la mente de cada uno. No es el hombre el criterio ultimo, sino la realidad.
La razón humana es mensurante con lo que debemos escoger, tambien mensurata, con un nivel objetivo de la realidad, para asi conseguir la verdad
Gorgias
Su postura puede llamarse nihilismo, se enuncia en 3 célebre tesis
1. Nada existe;
2. Si algo existiera, no lo podríamos conocer;
3. Si algo conociéramos, no lo podríamos expresar.
Es conocido el antagonismo que hubo entre los filósofos sofistas y el célebre Sócrates, primero de los grandes pensadores de la tradición griega (y maestro, entre muchos, de Platón). Esta diferencia se manifestaba en diferentes puntos de vista, y fue el pilar del descrédito que después se les tendría a los sofistas. Entre dichas diferencias podemos destacar:
Los sofistas cobraban por la enseñanza de sus saberes y el acceso a “la verdad”, mientras que Sócrates pensaba que la verdad no podía enseñarse, y conversaba con cualquier ateniense que estuviera dispuesto. Los sofistas poseían un saber enciclopédico y empleaban el debate como método de enseñanza, mientras que Sócrates creía en el diálogo (especialmente caminando, por eso se le apodaba el peripatético), y las preguntas y respuestas orientadas como método de enseñanza. Para los sofistas, el cometido primordial era la persuasión del otro, mediante argumentos lógicos o argucias destinadas a emocionar a su audiencia; mientras que Sócrates estaba firmemente comprometido con la obtención de la verdad, por impopular que ésta fuera.
En general, los sofistas eran críticos de la tradición religiosa griega; mientras que Sócrates era devoto de la ley y se sentía fuertemente vinculado a Atenas y a sus tradiciones.