Trastornos no orgánicos
del sueño

Parasomnias

Sonambulismo

El sujeto que lo padece inicia una deambulación
nocturna inconsciente, unida a diversos comportamientos “complejos”.

Terrores nocturnos

Son episodios breves y con período confusional posterior, caracterizados por despertar incompleto y brusco asociado a diversos signos vegetativos (taquicardia, taquipnea, sudación.)

Pesadillas

Aparecen habitualmente en el segundo tercio de la noche o en la madrugada el sujeto al despertar recuerda con claridad lo ocurrido durante la noche. Pueden estar facilitadas por situaciones de estrés personales.

Otros trastornos no
orgánicos del sueño

El insomnio suele acompañar a la depresión, trastorno por ansiedad, trastornos adaptativos, esquizofrenia, abuso y dependencia de alcohol, tabaco y otras sustancias psicoactivas.

Trastorno no orgánico del
sueño sin especificación

Se usa en situaciones en las que el clínico opta por no especificar la razón por la que no se cumplen los criterios para el trastorno de insomnio o un trastorno específico del sueño-
vigilia, e incluye presentaciones en la que hay insuficiente información para hacer un diagnóstico más específico.

Disomnias

Insomnio no orgánico

Los sujetos que lo padecen reaccionan con somatizaciones frente a situaciones estresantes.

Hipersomnia no orgánica

Consiste en la presencia de somnolencia diurna excesiva y
patológica. Tiene un amplio espectro de presentación que va desde somnolencia leve hasta accidentes de tráfico debidos a ataques de sueño incontrolable.

Trastorno no orgánico
del ciclo sueño-vigilia

Falta de sincronización entre el ritmo de sueño vigilia individual y el deseable en el entorno en que está
el sujeto, ocasionándole dificultades para el inicio y/o mantenimiento del sueño.