Generación del 27

Qué es la Generación del 27:

Conjunto de poetas y artistas que marcaron un antes y un después en la literatura y las artes en España, el nombre es por el tercer siglo post la muerte de Luis de Góngora y Argote (23 de mayo de 1927)

Caracteristicas

Innovación y vanguardismo: Incorporaron nuevas formas de expresión, fusionando tradición y modernidad.

Diversidad estilística: Mezcla de poesía popular y culta, surrealismo, simbolismo, etc.

Compromiso social y político: Muchos de los autores apoyaron la República y tuvieron que exiliarse o enfrentar represalias durante la Guerra Civil.

Influencia en las artes: No solo fue un movimiento literario, sino que también incluyó a artistas de otras disciplinas como la pintura, la música y el cine.

Intercambio cultural: Relación con otros movimientos europeos como el surrealismo y el simbolismo.

Autores

Federico García Lorca
(1898-1936)

Desde joven mostró interés por el arte, estudiando Filosofía y Letras y Derecho en la Universidad de Granada. En 1919 se trasladó a Madrid, donde se integró en la Residencia de Estudiantes y entabló amistad con destacados intelectuales. Su carrera literaria comenzó con Impresiones y paisajes (1918) y Libro de poemas (1921). En 1928 fundó la revista Gallo y en 1929 viajó a Nueva York, experiencia que inspiró Poeta en Nueva York, publicado póstumamente. En 1932 creó el grupo teatral La Barraca, con el objetivo de acercar el teatro clásico al pueblo. Sus obras teatrales más destacadas incluyen Bodas de sangre (1933), Yerma (1934) y La casa de Bernarda Alba (1936). Lorca combinó en su poesía y teatro el Modernismo con la Vanguardia, incorporando elementos tradicionales y simbólicos. Su teatro se caracteriza por una profunda carga lírica y visual.

Luis Cernuda
(1902-1963)

Su interés por la poesía comenzó en la infancia tras leer Rimas de Bécquer. Estudió Derecho en la Universidad de Sevilla, donde Pedro Salinas lo animó a participar en tertulias y leer a escritores del Siglo de Oro y autores franceses. En 1925, Juan Ramón Jiménez publicó sus primeros poemas en Revista de Occidente. Se trasladó a Madrid en 1926 y colaboró en varias publicaciones. Su primer libro, Perfil del aire (1927), fue mal recibido por la crítica. Luego escribió Égloga, elegía y oda (1928) y, tras conocer a Lorca, publicó Un río, un amor (1929), Los placeres prohibidos (1931) y Donde habite el olvido (1934). Durante la Guerra Civil, se exilió en Inglaterra, donde escribió Las nubes (1940) y Ocnos (1942). En 1947 se trasladó a EE.UU. como profesor de Literatura Española y, más tarde, a México, donde publicó Poemas para un cuerpo (1957) y Desolación de la Quimera (1962). Murió en México en 1963. Su poesía, influenciada por el surrealismo y la introspección, ha sido traducida a múltiples idiomas y sigue siendo una referencia fundamental de la literatura española.

Vicente Aleixandre
(1898-1984)

Pasó su infancia entre Málaga y Madrid, donde estudió Derecho y Comercio. Durante un tiempo fue profesor de Derecho Mercantil, pero una enfermedad lo llevó a dedicarse a la poesía. Influenciado por Bécquer y Rubén Darío, comenzó a publicar en revistas culturales, estableciendo amistad con poetas como Federico García Lorca y Luis Cernuda. En 1934 recibió el Premio Nacional de Literatura. Tras la Guerra Civil, permaneció en España y se convirtió en una figura importante para los jóvenes poetas, organizando tertulias en su casa de Madrid. Sus obras se distinguen por el uso de la metáfora y su evolución desde la poesía pura, con influencias de Juan Ramón Jiménez y Pedro Salinas, hacia una etapa surrealista y, posteriormente, una poesía más humanista.
Reconocido como el principal poeta surrealista español, Aleixandre recibió en 1977 el Premio Nobel, consolidando su legado y el de la Generación del 27. Ese mismo año fue condecorado con la Gran Cruz de Carlos III.

Rafael Alberti
(1902-1999)

Inició su formación en el Colegio de los Jesuitas del Puerto de Santa María, pero dejó el bachillerato para dedicarse a la pintura, influencia que se refleja en su obra. Su carrera poética comenzó con Marinero en tierra (1924-25), con el que ganó el Premio Nacional de Literatura. Sus primeras obras, como La amante (1925) y El alba de alhelí (1926), muestran influencias del cancionero popular español y de autores como Juan Ramón Jiménez y Antonio Machado. Con Cal y canto (1927) adoptó un estilo neogongorista antes de pasar al surrealismo con Sobre los ángeles (1928). Posteriormente, tras afiliarse al Partido Comunista, su poesía adquirió un tono político y social, como en Con los zapatos puestos tengo que morir (1930). También incursionó en el teatro con obras como El hombre deshabitado (1931). Exiliado tras la Guerra Civil, vivió en Argentina e Italia, publicando A la pintura (1945). Regresó a España en 1977 y fue elegido diputado, aunque renunció para dedicarse a la literatura. En 1983 recibió el Premio Cervantes.

Pedro Salinas
(1891-1951)

Inició estudios de Derecho, pero los abandonó para doctorarse en Filosofía y Letras en 1917. Su carrera literaria comenzó en la revista Prometeo y en 1924 publicó su primer libro de poemas, Presagios. Trabajó como lector en la Sorbona y luego fue profesor en la Universidad de Sevilla, donde conoció a Luis Cernuda. En los años 30 se trasladó a Madrid y dirigió la Universidad Internacional Menéndez Pelayo. Durante la Guerra Civil se exilió en EE.UU., donde enseñó en Wellesley College y la Universidad Johns Hopkins. Su poesía se divide en tres etapas: una inicial de poesía pura (Seguro azar), una amorosa (La voz a ti debida) y la del exilio (El contemplado). También escribió ensayos y teatro, influenciado por las vanguardias.