Expansion del cristianismo y del islamismo.
Cristianismo
El cristianismo es una de las religiones más grandes del mundo con seguidores en todo el mundo.
A partir de la muerte de Cristo comenzó la difusión de su doctrina, a lo largo de todo el Imperio romano, por parte de sus seguidores.
Partiendo de Jerusalén, la nueva religión encontró sus centros de cristianización principales en Roma y Bizancio. Roma se encargó de expandir la doctrina por la parte occidental del Imperio, apoyándose en Toledo, Armagh y Reims.
Durante el siglo I, las zonas cristianizadas se encontraban principalmente en el Mediterráneo oriental, es decir, el Levante, Anatolia, el delta del Nilo y el este de Grecia. También ya habían sido fuertemente evangelizadas Cartago, la región de Roma, Iliria y los enclaves de Vienne, Tarragona y Zaragoza.
Islamismo
El islam es una religión monoteísta cuyo dios es Alá, su profeta es Mahoma y sus enseñanzas vienen recogidas en el libro sagrado del Corán.
En apenas diez años, tribus nómadas de Arabia seguidoras de la doctrina de Muhammad (Mahoma) arrebataron al Imperio bizantino sus posesiones en la franja sirio-palestina y en Egipto, mientras que su triunfo sobre el Imperio persa les reportó las tierras de Irán e Irak
Como comentó Napoleón, si el cristianismo necesitó trescientos años para conquistar medio mundo, el islam solo necesitó veinte.
Un siglo después de la muerte del Profeta, el ámbito de dominación árabe era enorme: del río Indo al Atlántico y del Sahara a los Pirineos, el Cáucaso y Asia central.