El metodo de Lean Thinking
El punto de partida básico para el pensamiento lean es el valor. La especificación de valor de forma precisa es el primer paso fundamental en el lean thinking.
El valor lo crea el productor. Desde el punto de vista del cliente, esta es la razón por la que existen productores. No obstante, por multitud de razones, es muy difícil definir el valor de modo preciso por parte de los productores.
El valor sólo puede definirlo el consumidor final. Y solamente es significativo cuando se expresa en términos de un producto específico (un bien o servicio, y a menudo ambos a la vez) que satisface las necesidades del consumidor a un precio concreto, en un momento determinado.
Proporcionar el bien o servicio
incorrecto de forma correcta es muda.
Flujo de valor = Conjunto de todas las acciones necesarias para transformar la materia prima en producto terminado.
La identificación de la totalidad del flujo de valor para cada producto es el próximo paso en el campo del pensamiento lean, un paso que las empresas han intentado en raras ocasiones, pero que casi siempre revela la existencia
de enormes cantidades, verdaderamente asombrosas, de muda.
Concretamente, el análisis del flujo de valor mostrará casi siempre la existencia de tres tipos de acciones a lo largo de este: 1) Se descubrirán muchos pasos cuya creación de valor es inequívoca; 2) Se descubrirán muchos otros pasos que no crean valor alguno, pero que son inevitables de acuerdo con la tecnología actual y los activos de producción disponibles;
3) nos daremos cuenta de que muchos pasos adicionales no crean valor alguno y pueden evitarse de modo inmediato.
Fluir: Conectar el flujo de las actividades creadoras de valor y hacer que fluya el valor.
Pull: solo lo que se necesita, cuando se necesita y donde se necesita
Es el cliente el que tira de la producción siempre.
Los sistemas lean pueden fabricar en cualquier combinación cualquier producto que se esté produciendo actualmente, para que así la demanda cambiante pueda ser ajustada
de forma inmediata.
La capacidad de diseñar, programar y hacer exactamente lo que el consumidor desea precisamente, y en el momento que lo desea, significa que podemos olvidarnos de las previsiones de venta y fabricar simplemente lo que los consumidores realmente dicen que necesitan. Es decir, podemos
dejar que sea el cliente quien atraiga (pull) el producto de acuerdo con sus necesidades, en lugar de empujar (push) productos, a menudo no deseados, hacia el consumidor.
Perfección: los 4 principios anteriores forman un circulo virtuoso.
A medida que las organizaciones empiezan a especificar el valor de modo preciso, a identificar la totalidad del flujo de valor, a hacer que las etapas creadoras de valor para los productos específicos fluyan constantemente, y dejan que sean los consumidores quienes atraigan hacia sí (pull) valor desde la empresa, algo muy extraño empieza a suceder.
Las personas involucradas caen en la cuenta de que no hay límite en el proceso de reducción de esfuerzo, tiempo, espacio, coste y fallos, mientras ofrecen un producto que cada vez está más cerca de lo que el consumidor verdaderamente desea.
De repente, la perfección, el quinto y último principio del pensamiento lean, no parece una idea disparatada.
La filosofia Lean y sus principios
Cuando nace y cómo evoluciona el pensamiento Lean!
Una forma mejor de hacer cosas!