LUMEN GENTIUM
C1: El Ministerio de la Iglesia
La voluntad de Dios fue enciar a la tierra a su único hijo.
Cristo inaugura su Santa Iglesia o reino de los cielos; manifestado por la palabra y obras.
La Iglesia está compuesta en dos partes:
Divina
Humano
Dios no sólo creó al al hombre sino también al universo.
Dando a u su único hijo para ayudar a la humanidad del pecado.
Las Sagradas Escrituras tiene varias figuras para identificar y caracterizar a la Iglesia.
Redil
Rebaño
Campo de labranza de Dios
Jerusalén de arriba
Madre nuestra
Todos participamos de un mismo pan eucarístico somos parte también de un solo cuerpo místico por que nos unimos en Cristo.
C2: El Pueblo de Dios
Dios establece un nuevo pacto con el pueblo de Israel.
El sacerdocio común esta compuesto por:
Sacerdocio por los fieles
Ejerce con la repetición de los sacramentos, con la oración y acción de gracias.
Sacerdocio ministerial o jerárquico
En virtud de la sagrada potestad que posee , forma y dirige al pueblo sacerdotal, efectuando el sacrificio eucarístico en la persona de Cristo.
Los fieles incorporados por el bautismo quedan destinados por el carácter al cuto de la religión cristiana.
En el sacramento de la confirmación se enriquecen con la fuerza del Espíritu Santo para difundir y establecer su fe con su palabra y sus obras como verdaderos testigos de Cristo.
En el sacramento de la penitencia obtienen el perdón de sus ofensas hechas a Dios y a la Iglesia. .
Y dentro del sacramento del matrimonio participan de la unión de Cristo con la Iglesia, ayudándose mutuamente a santificarse en la vida conyugal, en la procreación y en la educación de los hijos de Dios.
Todos los hombres son llamados a formar parte del pueblo de Dios.
Recoge todas las costumbres cualidades y riquezas en cuanto sean buenas, las purifica, las fortalece y las eleva.
Todos los hombres son admitidos sean católico o no.
La Iglesia también reconoce que el Espíritu desea que todos los discípulos de Cristo se unan en paz.
También la salvación de los no cristianos que según sus creencias que practicando la rectitud y justicia también encuentran la salvación.
C3: Constitución jerárquica de la Iglesia y particularmente el Episcopado
Los Obispos tiene el perfil apostólico, ya que son los Ministros de Cristo.
Jesús después de haber hecho la oración al Padre, llamó a sus 12 discípulos.
Los apóstoles tenían que seguir con la misión divina dejada por Jesús aún después de su muerte.
Confiaron a modo de testamento la prolongación del mandato divino a los más allegados.
Los Obispos y el Romano Pontífice conforman el colegio apostólico siendo su cabeza el sucesor de Pedro.
Sólo el Solo el sucesor de Pedro tiene potestad plena, suprema y universal sobre la Iglesia y puede ejercer libremente y todos los demás están sujetos a la suprema autoridad del Romano Pontífice.
Todos los Obispos deben, promover y defender la unidad de la fe y la disciplina común en toda la Iglesia.
También instruir a los fieles en el amor de todo Cuerpo Místico de Cristo.
Deben proveer de recursos humanos y materiales a la iglesia misionera, prestar ayuda a las iglesias más pobres.
La misión de los Obispos debe hacerse por las leyes dictadas por la misma autoridad.
El Obispo siempre dirige la eucaristía
Tiene la autoridad para regir las ovejas encomendadas a ellos.
La tarea que tienen santificadora radica en la administración de los sacramentos, santificando a los fieles y con su ejemplo.
Los Obispos representan a Cristo y con la práctica de los sacramentos santifican a su Iglesia, le deben obediencia al Obispo reverentemente y son su ayuda en la ley del Señor.
Los diáconos son el grado inferior del sacerdocio
Reciben el orden al ministerio
Conservan y distribuyen la eucaristía llevando el viatico a los moribundos.
Asisten en la bendición a los matrimonios.
C4: Los Laicos
Son fieles cristianos que son llamados a dar testimonio con su vida en el mundo, ser pregoneros de la fe.
Los laicos son quienes recibieron el bautismo y la confirmación
Se convierten en testigo e instrumento vivo en la misión de la iglesia, procurando su crecimiento y su santificación.
Tienen una vocación admirable y son instruidos para que en ellos se reproduzcan cada vez mas abundantes frutos del Espíritu.
Representan al mundo y lo consagran en la celebración de la Eucaristía, sí llevan su vida en Santidad.
El deber de los laicos es perseverar y ser pregoneros en la fe, esperanza y de las cosas que esperamos con el testimonio de vida y de la palabra en la familia, colaboran en la evangelización del mundo.
A los laicos se les debe presentar todas las atenciones por parte del Prelado, con sentido de unidad, y así mismo ellos podrán participar manifestando sus parecer de acuerdo a lo establecido, con respeto y reverencia a sus pastores.
C5: Vocación Universal a la Santidad en la Iglesia
La Iglesia será llamada Santa
Ya que a través del bautismo fuimos hechos hijos de Dios.
La Iglesia es indefectiblemente santa por lo que Cristo se entregó a sí mismo por ella para santificarla.
Se manifiesta incesantemente en los frutos de gracia que el Espíritu Santo produce en los fieles y aparece de modo particular en la practica de los que comúnmente llamamos consejos evangélicos.
Todos los que han sido bautizados se han hecho partícipe de la divina naturaleza.
Los Pastores del rebaño de Cristo deben de cumplir con su deber ministerial, sanamente y con entusiasmo, con humildad y fortaleza.
Los diáconos deben preservarse de todo vicio siendo ejemplo para toda la sociedad.
Los esposos deben mantenerse en la gracia durante toda su vida y educar en la doctrina cristiana.
Lo más necesario es amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo por Él.
Asistiendo a la celebración de la Eucaristía
Negándose a sí mismo en el servicio a los demás.
Los hombres y mujeres entrados al servicio Divino deben asemejarse a Cristo en su obediencia, buscando la santidad y la perfección de su propio estado.
C6: Los Religiosos
Las familias religiosas escogerán los votos necesarios para cumplir su misión y servicio.
Deben obediencia al Sumo Pontífice
A los Obispos esmerándose en preservar la vocación a la que ha sido llamado.
La manera de asumir los consejos que brinde la Iglesia parece como distintivo en los miembros de la Iglesia en cumplimiento de su vocación.
El Sumo sacerdote puede someter una sola autoridad a cualquier instituto religioso.
También confinados a la autoridad patriarcal propia.
El trabajo de servicio al prójimo se reconoce como un valor fundamental.
C7: Índole escatológica de la Iglesia peregrinante y su unión con la Iglesia celestial
Todos somos de Cristo, todos tenemos un mismo espíritu; y así conforman la Iglesia.
Iglesia Militante
Iglesia purgante
Iglesia celestial
intercede ante El Padre por la Iglesia peregrina.
La Iglesia se restaura comenzando por Cristo, impulsada por la venida del Espíritu.
Todas las personas que son de Cristo y tiene su Espíritu, forman una sola Iglesia y con Él están unidos.
Los peregrinos son los que interceden incesantemente por nosotros ante El Padre mediante su único hijo Jesús.
La Iglesia ofrece sufragios y ora por los difuntos para que se encuentren en paz y quede libres de sus pecados.
C8: La Bienaventurada Virgen María, Madre de Dios, en el Ministerio de Cristo y de la Iglesia
I. Introducción
María representa a los fieles de la Iglesia que se une con Dios para nuestra salvación.
maría presta su cuerpo para traer al mundo al Hijo de Dios.
Es considerada como Hija predilecta del Padre.
Es madre de los miembros de Cristo por haber cooperado con su amor a que naciesen en la Iglesia los fieles.
II. Función de la Bienaventurada Virgen en la Economía de la Salvación
La Virgen María es profetizada en el antiguo testamento como la promesa de victoria sobre la serpiente.
Si una mujer contribuyó así a la muerte así María contribuyó a la vida.
Es la más santa e inmune de pecado.
El nudo de la desobediencia de Eva fue desatado por la obediencia de María.
María movida por la misericordia consiguió por su intercesión el comienzo de los milagros de Jesús
Fue María quien ruega al don de espíritu Santo en el día de Pentecostés; terminando así su curso de vida terrena fue asunta en alma y cuerpo a la gloria de celestial y enaltecida por el Señor como Reina del universo.
III. La Santísima Virgen y la Iglesia
María cumpliendo la voluntad de Dios se apoya en su mediación para fomentar la unión inmediata de los creyentes con Cristo.
Por la obediencia, la fe, la esperanza y la encendida caridad en la restauración de la vida sobre natural de las almas.
Poe eso es que María es nuestra Madre en orden de la gracia.
María por el don y el oficio de la maternidad divina y su unión con Cristo es Madre de la Iglesia y es el tipo de la Iglesia.
Lo que la Iglesia busca es la Gloria de Cristo, la cual se hace semejante al modelo de María.
María es modelo de virtudes.
IV. Culto de la Bienaventurada Virgen María
María es honrada como Madre de Dios
Este culto creció en el concilio de Éfeso
Todos los hijos de Iglesia practican este culto a la Bienaventurada Virgen María.
V. María signo de esperanza cierta y consuelo para el pueblo de Dios peregrinante
María es la imagen y el principio de la imagen de la Iglesia.
Todos sus fieles ofrecen súplicas incesantes a la Madre de Dios y a los hombres para que interceda entre su hijo.