Principios ambientales contenidos en instrumentos internacionales.
El principio de la debida diligencia
Es el único de todos los principios de la Declaración de Río de Janeiro (‘92) que se refiera a la relación: Gobierno – ciudadano
Establece los elementos mínimos necesarios para una adecuada gobernabilidad ambiental.
Busca reducir conflictos sociales por asuntos ambientales
Sienta las bases para transitar a una “Democracia Participativa”.
Principio de la Equidad Intergeneracional
El derecho al desarrollo debe ejercerse en forma tal que responda equitativamente a las necesidades de desarrollo y ambientales de las generaciones presentes y futuras.
El Principio Preventivo^
Este principio busca la prohibición en la transferencia, particularmente de sustancias nocivas, hacia Estados que al tener una legislación ambiental menos estricta, pudieran verse gravemente afectados.
El Principio sobre el deber de no discriminación por daños ambientales
Emanan de los instrumentos internacionales de Derechos Humanos
Principio de la Soberanía estatal y la responsabilidad de no causar un daño ambiental
Los Estados tienen el derecho de explotar sus recursos naturales de acuerdo con sus propias políticas de medio ambiente, y la responsabilidad de asegurarse que las actividades llevadas a cabo en su jurisdicción no causen daño al ambiente de otros Estados.
El principio “El que contamina paga”
Busca trasladar el costo de la contaminación a quien la generó, teniéndose que pagar por los daños y perjuicios que causan sus actividades contaminantes.
El Principio Precautorio
“Con el fin de proteger el medio ambiente, los Estados deberán aplicar ampliamente el criterio de precaución conforme a sus capacidades. Cuando haya peligro de daño grave o irreversible, la falta de certeza científica absoluta no deberá utilizarse como razón para postergar la adopción de medidas eficaces en función de los costos para impedir la degradación del medio ambiente”
El Principio de la Subsidiaridad
Este principio se basa en el hecho de que, en la medida de lo posible, las decisiones deben de ser tomadas por los individuos o por las familias, más que por la sociedad en su conjunto; por la comunidad local más que por el Estado; y por los Estados miembros de una federación más que por la propia federación.
Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, realizada en 1992 en Río de Janeiro