Las encías saludables presentan un tono rosa claro, una textura similar a la cáscara de naranja y no muestran signos de sangrado, incluso al cepillarse o masticar. En contraste, las encías enfermas pueden manifestar síntomas como mal aliento, enrojecimiento, inflamación, sensibilidad, sangrado, dolor al masticar, dientes flojos y encías retraídas.
Recesiones de encía
Además podemos encontrar otros casos con pérdida de encía en uno o varios dientes, no necesariamente acompañados de enfermedades periodontales. Estas pérdidas de encía pueden deberse a una técnica de cepillado demasiado agresiva, una encía excesivamente fina, o la existencia de un frenillo que tira de la encía. En estos casos, la solución vendrá mediante un injerto de encía, que solucionará el problema estético y funcional del diente afectado por la pérdida de encía.
Periimplantitis
Las patologías antes señaladas no sólo afectan a los dientes naturales. Cuando este tipo de enfermedades de las encías se dan sobre piezas implantadas, con la consiguiente pérdida de hueso alrededor de los mismos, lo llamamos periimplantitis.
Periodontitis
Cuando la gingivitis no se trata debidamente, puede derivar en periodontitis. En este estadío de la enfermedad, las encías se retraen y forman bolsas alrededor del diente. Las toxinas de las bacterias y la respuesta natural del sistema inmune del cuerpo contra la infección, empiezan a destruir el hueso y el tejido conjuntivo que mantienen los dientes en su posición. El hueso, la encía y el ligamento periodontal que sostienen los dientes se destruyen y con el tiempo, los dientes pueden aflojarse e incluso caerse. Esta pérdida de encía favorece además la sensibilidad dentaria al frío y al calor, al quedar parte de la raíz al descubierto. En esta etapa de la enfermedad estamos ya ante una patología irreversible.
Gingivitis
Cuando el sarro se acumula sobre las encías durante un periodo prologado de tiempo, puede derivar en inflamación gingival (inflamación de las encías). Nuestras encías enrojecen, duelen y sangran fácilmente ante el cepillado. A esta situación se la conoce como gingivitis. Si se retira el sarro a tiempo, y se mantiene un higiene posterior correcta, se le dará solución al problema y el proceso será reversible. Esta forma de enfermedad periodontal no ocasiona pérdida de hueso ni del resto de los tejidos que sostienen los dientes.
FUNCION
Su función principal es la de soportar y mantener los dientes en su sitio.
CARACTERISTICAS DE ENCIA ENFERMA
• Mal aliento constante • Encías rojas o inflamadas • Encías muy sensibles o que sangran • Dolor al masticar • Dientes flojos • Dientes sensibles • Encías retraídas o dientes que se ven más largos de lo normal.
tipos de encias
Encía adherida
Es la que está alrededor de los dientes en forma de collar. En la zona de los molares (la parte trasera de la dentadura) suele ser más chica que en la zona de los incisivos (parte delantera de la dentadura).
Encía marginal o libre
Este tipo de encía es la que rodea a los dientes y tiene forma de collar o corona. Se halla por sobre la línea gingival que se une con el diente y va hasta la encía adherida. Se diferencia de está última se puede diferenciar porque su aspecto es más translúcido Tiene un ancho de entre 0.5 a 2 mm.
Encía interdental
Se encuentra en el área interproximal debajo de la zona de contacto con el diente. Su forma es de pirámide entre los dientes. El ancho y nivel de profundidad depende de qué cantidad de la superficie dental contactan con ella. Este tipo de encía no está queratinizada.
CARACTERISTICAS DE ENCIA SANA
Una encía sana se caracteriza por lucir un tono rosa claro o pálido. · SIN INFLAMACIÓN: Una encía sana tendrá un aspecto delgado y una textura similar a la de una cáscara de naranja. · SIN SANGRADO: En encías sanas no existirá ninguna presencia de sangrado. Ni al cepillarse, comer o hablar.
CONCEPTO
La encía, también denominada gingiva, es el tejido conectivo fibroso que está alrededor del cuello de los dientes y cubre el hueso alveolar.