Programar para la diversidad

Dentro de la programación para la diversidad existen niños que no pueden acceder a los aprendizajes escolares del mismo modo que la mayoría, por lo que necesitan una serie de recursos que les ayuden, una serie de adaptaciones. Las adaptaciones curriculares son estrategias educativas para facilitar el proceso de enseñanza-aprendizaje en algunos alumnos que presenten dificultades al momento de aprender. Dentro de las principales adaptaciones curriculares para el desenvolvimiento de los niños con Necesidades Educativas Especiales (NEE) tenemos las siguientes:

Adaptaciones en los objetivos y contenidos

Son las diversas modificaciones que se efectúan en los diferentes elementos de la propuesta educativa desarrollada para un alumno, con el fin de responder a sus necesidades educativas especiales.

Favorecer unos objetivos sobre otros para dar respuesta a las necesidades educativas.

Prescindir de aquellos adjetivos y contenidos que no atienden a la diversidad de nuestro alumnado.

Adaptar los objetivos y contenidos a la diversidad de nuestros alumnos/as.

Los alumnos/as con necesidades educativas especiales contaran con objetivos y contenidos específicos atendiendo al tipo de necesidad.

Adaptaciones en la metodología

La implementación de la metodología ayuda a organizar las situaciones de enseñanza sin perder de vista las necesidades concretas de cada uno de los niños.

Fomentar la motivación en los niños/as y el ampliar sus intereses hacia el tema a tratar en el aula.

Utilizar refuerzos en la metodología junto con estrategias para llamar la atención del grupo.

Trabajar los contenidos más adecuados a nuestros alumnos/as.

Adecuar nuestro lenguaje al nivel de comprensión de los alumnos/as

Hacer que nuestro alumnado tenga una participación activa fomentando el trabajo en grupos cooperativos.

Utilizar técnicas y estrategias que sean útiles para nuestro alumnos/as

Priorizar técnicas y estrategias que favorezcan la experiencia, reflexión y expresión.

Adaptaciones en las actividades de aula

Las actividades deben favorecer la participación activa, la iniciativa, el interés, la motivación, la creatividad y la autonomía en la lógica del aprendizaje significativo.

Realizar actividades cercanas a la vida diaria, lo que conocen, ven, sienten…

Proponer actividades con diferentes posibilidades de realización.

Programar diferentes actividades para trabajar un mismo contenido.

Las actividades propuestas tendrán diferentes grados de realización.

Realizar actividades para realizar en gran grupo, pequeño grupo, por parejas y de forma individual.

Adecuar las actividades a las motivaciones e intereses de nuestros alumnos en el desarrollo de cada unidad didáctica.

Adaptaciones en el proceso de evaluación

Los instrumentos o pruebas aplicadas, por parte del docente, deben estar relacionados con las necesidades iniciales diagnosticadas y compararlas con lo planteado en el currículo base para garantizar la potenciación del aprendizaje.

Evaluar diferentes situaciones de aprendizaje.

Utilizar diferentes instrumentos y procedimientos para realizar la evaluación.

Proponer a los alumnos/as su propia autoevaluación.

Diseñar diferentes actividades para evaluar el progreso de los alumnos/as.

Realizar una evaluación inicial al principio de cada unidad didáctica y poder detectar las ideas previas que poseen los alumnos/as, cuales son sus intereses y motivaciones para el nuevo tema.