Homo Sapiens

Ernst Cassirer, explica que le hombre no vive en un universo puramente fisico si no en un iniverso simbolico

La ruptura se produce a mediados de nuestro siglo, con la llegada del televisor y de la televisión

Como consecuencia, el telespectador es más un animal vidente que un animal simbólico.

Y esto era un cambio radical de dirección, porque mientras que la capacidad simbólica distancia al horno sapiens del animal, el hecho de ver lo acerca a sus capacidades ancestrales, al género al que pertenece la especie del horno sapiens.

Desde mediados del XIX en adelante comienza un nuevo y diferente ciclo de avances tecnológicos. En primer lugar, la invención del telégrafo, después la del teléfono.

Con estos dos inventos desaparecía
la distancia y empezaba la era de las comunicaciones inmediatas

La radio es el primer gran difusor de comunicaciones; pero un difusor que no
menoscaba la naturaleza simbólica del hombre. Ya que, como la radio «habla», difunde
siempre cosas dichas con palabras.

Las civilizaciones se desarrollan con la escritura, y es el tránsito de la comunicación oral a la palabra escrita lo que desarrolla una civilización.

Desde la invención de la imprenta el progreso de la reproducción impresa fue lento pero constante, y culmina —entre
los siglos xviii y xix

La capacidad simbolica de los seres humanos se depliega en el lenguaje, en la capacidad de comunicar mediante una articulacion de sonidos y signos significantes.

El lenguaje esencial que de verdad caracteriza e instituye al hombre como animal simbólico es «lenguaje-palabra», el lenguaje de nuestra habla.

El hombre reflexiona sobre lo
que dice. Y no sólo el comunicar, sino también el pensar y el conocer que caracterizan
al hombre como animal simbólico se construyen en lenguaje y con el lenguaje

De este modo clasificaba Linneo a la especie humana en su sistema de la naturaleza de 1758