LA INVESTIGACIÓN-ACCIÓN EN LA EDUCACIÓN FORMAL Y NO FORMAL

La investigación-acción es una metodología de investigación educativa orientada a la mejora de la práctica de la educación, y que tiene como objetivo básico y esencial la decisión y el cambio.

Sus perspectivas son

Por una parte, la obtención de mejores resultados y rendimientos.

Por otra, facilitar el perfeccionamiento de las personas y de los grupos con los que trabajan.

En el campo social se ha producido una nueva sensibilidad hacia los grupos discriminados y desfavorecidos, lo que ha despertado más vivamente el valor de la justicia y de la solidaridad.

Multiplicidad cultural

Multiculturismo

Interculturismo

Juntos estos valores forman trabajadores sociales en los más diversos campos, más conscientes de sus necesidades y de investigar sobre el propio trabajo con el fin de mejorarlo.

Sus campos son

Laboral

Politico

Cultural

El término de investigación-acción se usa en el contexto educativo junto a otros similares como investigación participativa, colaborativa (Jacullo-Noto, 1984), demócratica, crítica (Holly, 1986); todas ellas, en el marco de una investigación de tipo cualitativo.

Sus dimensiones son

Inductiva, porque parte de la observación de un fenómeno dado mediante la recolección de datos a partir de ella, intenta establecer regularidades.

Subjetiva, en la medida que explícita y analiza datos subjetivos y su meta es reconstruir categorías específicas que los participantes usan para conceptualizar sus propias experiencias y su visión del mundo.

Generativa, en cuanto que intenta, a partir de la descripción sistemática de variables y fenómenos, generar y refinar categorías conceptuales, usando una o más bases de datos como fuente de evidencia.

Constructiva, en unidades de análisis que han de estudiarse se extraen de lo que va sucediendo.

Según Carr y Kemmis (1988), requisitos que este tipo de investigación debe satisfacer son

Rechazo de las nociones positivistas de racionalidad, objetividad y verdad.

Empleo de las categorías interpretativas de los maestros.

Oferta de procedimientos para distinguir ideas e interpretaciones sistemáticamente distorsionadas por la ideología de aquellas que no lo estén y formas de superar los autoanálisis erróneos.

Preocupación por identificar y exponer aquellos aspectos de orden social imperante que se oponen al cambio racional y, capacidad para ofrecer explicaciones teóricas que permitan a los maestros tomar conciencia del modo de superarlos.

Reconocimiento explícito de su carácter práctico, en el sentido de que los indicios acerca de su veracidad, vendrán determinados por su capacidad para relacionar la teoría y la práctica.

La investigación-acción, adquiere una gran importancia en el campo educativo en el momento actual, no por sus grandes hallazgos, ni por su relevancia académica, ni siquiera por los resultados que en un futuro próximo, pudiera aportar, sino que merece una especial consideración al ofrecernos una vía especialmente significativa para superar el binomio teoría-práctica.

Sus rasgos característicos son

La investigación-acción implica colaboración, transformación y mejora de una realidad social.

Se orienta hacia la creación de grupos de reflexión autocríticos de personas que se implican en un proceso de transformación.

La investigación-acción es participativa: a través de ella las personas traba- jan por la mejora y el perfeccionamiento constante de sus propias prácticas y la de los demás participantes en el proceso.

Se orienta a la mejora de la acción educativa y del propio investigador, con una visión dinámica de la realidad pues reconoce que los fenómenos educativos están siempre interrelacionados y, además, son siempre susceptibles de mejora.

Desde el punto de vista metodológico, la investigación-acción se concibe de un modo amplio y flexible.

La investigación-acción aporta un nuevo tipo de investigador. Investigador que, desde su propia realidad, intenta contribuir a la resolución de problemas, cam- biando y mejorando las prácticas educativas.

La investigación-acción parte de la práctica y pretende un determinado rigor metodológico distinto de la investigación básica, pues tiene una visión más amplia de la noción de control.

La vinculación de los términos "acción" e "investigación" definen los rasgos esenciales de esta modalidad de investigación, puesto que someten las ideas a la prueba de la práctica.

Existen diversos modelos

Modelo de Kurt Lewin (1946), al que se le considera el "padre" de esta metodología.

Es una actividad desarrollada por grupos o comunidades con el propósito de cambiar sus circunstancias de acuerdo con una idea compartida por los miembros del grupo.

Es una práctica social reflexiva, donde no cabe hacer ninguna distinción entre la práctica que se investiga y el proceso de investigación de esta práctica.

Es un proceso que exige la integración de la acción, el entrenamiento y la investigación y posee grandes potencialidades para mejorar las relaciones intergrupales.

El modelo de Elliot se centra sobre situaciones sociales que son percibidas como problemáticas, susceptibles de cambio y necesitadas de alternativas operativas.

Su propósito es el de profundizar en la comprensión y el diagnóstico del problema.

Invita a la reelaboración discursiva de las contingencias de la situación y al establecimiento de interrelaciones entre las mismas.

Articula lo que sucede en un discurso, lo más próximo posible al propio lenguaje y significaciones aportadas por los participantes.

La validación de la investigación realizada sólo se hace posible en contextos de diálogo con los sujetos implicados.

La investigación en la acción exige el establecimiento de un flujo informativo abierto y fecundo, entre el investigador y los sujetos inmersos en la investigación.

El modelo de Me Niff(1988).

Propone un esquema de investigación-acción que tiene capacidad autogenerativa.

El proceso a seguir para una investigación-acción, es un camino que se caracteriza por no ser lineal sino más bien sinuoso, cíclico y dialéctico.

Sus pasos son

Primer paso: Diagnosticar y descubrir una preocupación temática "problema"

Es importante llegar a descubrir y a describir una preocupación temática, tarea que no siempre resulta fácil.

Segundo paso: construcción del plan.

Planear estrategias es fundamental.

Tercer Paso: Puesta en práctica del plan y observación de cómo funciona

Se trata en este paso de realizar lo planeado con vistas a la solución del problema.

A) Técnicas e instrumentos de recogida de datos.

a) Técnicas de lápiz y papel.

b) Las denominadas técnicas "vivas".

c) Técnicas de carácter audio-visual.

B) ¿Qué datos debemos recoger?

C) Control de datos

Cuarto paso: Reflexión e integración de resultados.

No basta con describir lo que vamos obteniendo; pretendemos comprender la realidad para transformarla. Se reflexiona sobre el plan de acción sobre todo el proceso, y las acciones.

Comentario final

Después de haber leído y analizado las diferentes bibliografías contenidas en dicho documento, puedo abundar que dentro de los elementos que me llamaron más a la atención están, para trabajar con una investigación-acción, ya sea formal o no formal de debe de tener en cuenta la sistematización y mejora de la realidad. Así como también tener en cuenta de manera principal su vinculación de transformación y cambio, en la realidad social, y su justificación como razón de ser.