La semióticade Umberto Eco

El signo como un proceso

el signo desempeña un papel crucial en cualquier proceso comunicativo, (emisor, código, mensaje y receptor).

El signo no es solamente un elemento que entra en el proceso de comunicación

El signoy sus clasificaciones

Clasificación

Eco advierte que la clasificación de los signos podría ser un proceso infinito.

Delimita su enfoque a aquellos signos que tienen una fuente reconocible.

Signos Naturales

Son aquellos que no son emitidos intencionalmente por alguien, sino que son el resultado de procesos fuera de nuestro control.

También conocidos como señales, indicios o síntomas, corresponden a lo que Peirce clasificó como signos índice.

Signos Artificiales o Culturales

Son emitidos intencionalmente por alguien para comunicar un mensaje, utilizando códigos específicos.

Pueden ser clasificados como signos símbolos según la clasificación de Peirce.

Interpretación de los Signos

Eco destaca que tanto los signos naturales como los artificiales requieren de una convención, aprendizaje y tradición para ser comprendidos.

La principal característica que hace que algo sea llamado signo no es la fuente, ni el material del significante, sino el proceso mental por el cual alguien interpreta las cosas como signos.

El signo

Umberto Eco distingue dos tipos de signos: los culturales o artificiales, creados por la sociedad para comunicarse, y los naturales, que surgen de manera espontánea en la realidad. Ambos tipos requieren de una convención y aprendizaje para ser comprendidos.

El signo comoun fenómeno filosófico

Eco argumenta que los signos son el resultado de la abstracción mental que nos permite comprender la realidad.

El signo y suscaracterísticas comunes

los signosestímulos suscitan signos respuestas, sin que nunca se pueda alcanzar la realidad mental subyacente, si no es por medio designos

conclusión

La semiótica de Umberto Eco se destaca por su arraigada conexión con la filosofía. Eco postula que los signos surgen de la abstracción mental, permitiéndonos comprender la realidad y generar cultura a través de la actividad simbólica que culmina en el lenguaje.