PIB, EMPLEO Y SUBEMPLEO
Topic principal
PIB
Fernández expone:
PIB representa el valor de todos los bienes y servicios finales que son producidos por una nación en un tiempo determinado, el cual suele corresponder por año.
Por otro lado, el crecimiento económico es el aumento del valor de los bienes y servicios finales, o el valor de la renta producidos por una economía. Esto se da en un determinado período, el cual es por lo general un año, y se encuentra enfocado en un país o región como tal
En el Ecuador el PIB se compone de:
Agricultura, ganadería, caza, silvicultura, pesca.
Explotación de minas y canteras
Industria Manufacturera
Construcción
Comercio al por mayor y menor.
Administración pública y resto de servicios.
Santiago Pampillón menciona que:
El valor del PIB de un país se lo encuentra de forma nominal y real.
Nominal es el valor a precios de mercado de precios corrientes de la producción de bienes y servicios finales producidos en un país durante un período determinado, normalmente un año.
El PIB real es la producción de bienes y servicios finales producidos en un país pero a precios constantes, es decir, el PIB real elimina el cambio de los precios a lo largo de los años mientras que el PIB nominal o a precios corrientes, sí refleja estos cambios anuales, ya sean incrementos (inflación) o disminuciones (deflación)
El Banco Central del Ecuador dio a conocer:
En los últimos 6 años, el Ecuador ha tenido fluctuaciones en cuanto las tasas de crecimiento del PIB, se registrándose un punto más decreciente en su crecimiento en el año 2016 con 1,2%.
Sin embargo, en los años 2014 y 2017 se evidencia un crecimiento significativo en la economía del país, es decir, de 3,8 % y 2,4 % respectivamente y esto se debe al desempeño de la economía no petrolera, el gasto de consumo final de los hogares, las exportaciones de bienes y servicios y gasto de consumo final del gobierno (Banco Central del Ecuador, 2018).
Los expertos del FMI mencionan que:
Para el año 2020, se preveía que Ecuador crezca en 0,5 %, según el último informe de Perspectivas Económicas Mundiales.
Las previsiones del FMI mostraban una ligera mejoría en la economía ecuatoriana, aunque manifestaban cifras inferiores a la caída del PIB a 1.2 % en 2016.
El 2016 fue uno de sus peores años de la última década, debido a los bajos precios del petróleo y el devastador terremoto que asoló la costa norte del país el 16 de abril de ese año.
Los datos no tienen en cuenta el impacto que pueda tener el 2019 los once días de paralización por las protestas que desató el alza decretada por el Gobierno en el precio de los combustibles, ahora revertida, y que ha supuesto una pérdida de consumo considerable
SUBEMPLEO
A nivel nacional, a marzo de 2019 la tasa de subempleo fue de 18,7 %; en el área urbana, 18,5 % y en el área rural, 19,1%.
Entre marzo de 2018 y el mismo mes de 2019, esta tasa no presentó variaciones estadísticamente significativas a nivel nacional ni por área de residencia.
La variación no es alta entre las tres áreas, es decir, el subempleo es el mismo tanto en la ciudad como en los lugares más aislados.
Como dato importante, se debe acotar que la tasa de desempleo para las mujeres fue mayor que la de los hombres.
Así, en marzo de 2019, a nivel nacional el 5,7 % de las mujeres en la población económicamente activa (PEA) estuvieron en situación de desempleo, mientras que entre los hombres, el desempleo fue de 3,8 %.
Finalmente, según los datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), se revela que todos los diciembres, entre el 2007 y el 2013, la tasa del subempleo nunca ha sido menor al 50 %.
El último mes del año que terminó, el indicador alcanzó 52,49 %, es decir, 1,59 puntos porcentuales más que en el mismo mes del 2012.
Considerando al subempleo a las personas con empleo que, durante la semana de referencia, percibieron ingresos inferiores al salario mínimo y/o trabajaron menos de la jornada legal y tienen el deseo y disponibilidad de trabajar horas adicionales.
Es la sumatoria del subempleo por insuficiencia de tiempo de trabajo y por insuficiencia de ingresos.
Tanto en el año 2017 como en el año 2019, la inflación se cerró con cifras negativas, siendo de -0,20 % y -0,07 % respectivamente.
En el 2017, la variación presentada en la inflación se da debido a que la economía del país meses atrás había presentado una recesión donde el PIB cayó en 1,5 %, siendo esto producto de la caída del precio del petróleo
En cambio para el año 2019, se presentó una inflación negativa debido a varios factores como son, las protestas de octubre y el incremento de la inmigración venezolana al país, lo que ha ocasionado incremento en el desempleo y la disminución del empleo adecuado.
Por lo tanto, las cifras negativas presentadas en la inflación son una señal de que la población está demandando menos bienes
DESARROLLO Y EVOLUCIÓN DEL PIB EN ECUADOR
El rendimiento financiero de un país se denota en el crecimiento de su PIB; el aumento de este indicador significa el crecimiento de la productividad a nivel país, lo que podría traducirse en una disminución de la tasa de desempleo, un aumento en la calidad de vida de los pobladores, más diversidad de productos y aumento de la inversión extranjera.
La evolución económica del Ecuador se vio marcada por la dolarización.
En el año 1999, previo a este evento, se estimaba un decrecimiento de -4%.
Se podría denominar a esta etapa como pre dolarización, donde su principal característica fue el uso del sucre como la moneda de uso oficial.
Montesino (2007) dividió a esta década en dos partes:
El crecimiento comprendido entre 1991 a 1997
El decrecimiento en el período 1998-2000.
Oleas (2010) explica que:
El período de decrecimiento económico en el Ecuador inició en 1998 cuando el sistema bancario colapsó por razones tanto externas como internas
Otros factores fueron el fenómeno de El Niño en 1998, que ocasionó pérdidas de 2,8 mil millones de dólares y un impacto en el PIB de ese año.
Los rezagos de la guerra del Cenepa en 1995
La crisis asiática de 1997 también influyeron.
Los efectos negativos de la crisis acarrearon un mayor índice de pobreza, salida del país de cientos de miles de personas, fuga de capitales y desconfianza en el sistema financiero nacional, a lo que se sumó el impacto inicial de la dolarización, medida implementada en el 2000.
Del año 2001 al 2010 se mantuvo una tasa de crecimiento positivo entre años, sin embargo, la tendencia sigue siendo decreciente, pese a que ahora poseíamos una moneda que mantenía fuerte y estable a la economía ecuatoriana.
Los puntos más notorios se ven reflejados en el año 2004 con un crecimiento del 8,2 % y en el 2009 con un 0,6 %.
En el 2004 Ecuador registró la mayor tasa de crecimiento de la última década que alcanzó un 8,2 %, esto debido a la puesta en funcionamiento del oleoducto de crudos.
Además, el sector bancario comenzó una mayor colocación en créditos de consumo; se añade que el sector externo fue muy dinámico en el 2004 gracias al fuerte incremento de las exportaciones de crudo, acompañado por aumentos significativos de las importaciones.
En el 2009 el PIB del Ecuador creció solo en un 0,6%, siendo una de las tasas más bajas de la década, esto debido a que la producción de petróleo crudo fue menor que la registrada en 2008.
Si bien la producción de Petroecuador, se incrementó un 6,7 % durante el año, esto no bastó para compensar la caída de aproximadamente un 15 % de la producción privada.
El desempleo nacional urbano fue aumentando gradualmente desde junio de 2008; en cuanto al sector externo, el valor de las exportaciones de bienes durante 2009 disminuyó respecto al 2008 debido a la baja del valor de las exportaciones petroleras como consecuencia de una reducción del volumen y precio.
El valor de las exportaciones no petroleras también se redujo, aunque a una tasa menor (-5 %). El buen desempeño del banano, cacao y pescado evitaron que esta caída fuera mayor.
En enero de 2009 se introdujeron restricciones temporales a las importaciones como salvaguardia para la cuenta corriente, dado que el Ecuador no cuenta con una política cambiaria para controlar el déficit.
Además, la economía exhibió un déficit fiscal, así como un deterioro de la cuenta corriente de la balanza de pagos y una mayor tasa de desempleo, la inflación mostró una tendencia a la baja hasta septiembre de 2009, adicionalmente el Ecuador empezó el año con una apreciación real efectiva, debido principalmente a la devaluación monetaria mostrada por la mayoría de sus socios comerciales con respecto al dólar estadounidense (CEPAL, 2010).
La década comprendida entre el 2011 al 2019 está marcada con una notoria línea de tendencia negativa con su mayor auge en el año 2011, donde la tasa de crecimiento del PIB fue del 7,9 % y su mayor baja en el año 2016 con un decrecimiento del -1,2 %.
El PIB nominal o a precios corrientes del Ecuador alcanzó en 2011 los 65 945 millones de dólares, lo que implica un crecimiento en términos nominales del 7,9 % respecto al 2010.
El crecimiento de la economía ecuatoriana se explica principalmente por el impulso de la demanda interna (consumo de los hogares y del gobierno), así como por la variable inversión
Según el BCE, el consumo final de los hogares, tuvo un crecimiento del 7,7 %, mientras el consumo público aumentó en 1,4 %.
Respecto al decrecimiento económico presentado desde el 2016, la Cámara de Comercio de Guayaquil (2017) explica que para el 2016 hubo un decrecimiento en todas las variables que explican el PIB: exportaciones, Formación Bruta de Capital Fijo (FBKF), consumo de hogares y consumo de gobierno.
De las 18 industrias clasificadas por el BCE, 10 decrecieron. La industria de la construcción es una de las 5 industrias que más decrecieron (-8,9 %), las ventas en este sector se vienen contrayendo desde el 2014, afectados por la caída de la inversión pública, las salvaguardias y la incertidumbre jurídica provocada por la Ley de Plusvalía, que limita la recuperación del sector.
DESEMPLEO
La tasa de desempleo para las mujeres es mayor a la de los hombres. En marzo del 2019 a nivel nacional, el 5,7 % de las mujeres en la PEA estuvieron en situación de desempleo, mientras que entre los hombres el desempleo fue de 3,8 %. Esta brecha del 1,9 % fue estadísticamente significativa.
En marzo de 2019, la tasa de desempleo a nivel nacional fue de 4,6 %; a nivel urbano esta tasa se ubicó en 5,8 %, y a nivel rural, en 2,2 %. Las variaciones tanto a nivel nacional, urbano y rural respecto a marzo de 2018 no fueron estadísticamente significativas.