LA ESCUELA: COMUNIDAD QUE APRENDE

La escuela -organización- comunidad de aprendizaje que aprende

Tal concepto de comunidad no sólo se aplica a la escuela sino a todas las
organizaciones que pasan del yo a los valores compartidos.

aquello que une las diversas definiciones de comunidad es el lazo que une a los participantes a un conjunto de valores y de ideales compartidos

es decir, algo especial que va más allá de sí mismos y de los propios intereses

es un conjunto de personas que viven una unidad
que las vincula con la construcción de una idea

La unión en
torno a valores y a ideales compartidos evidencia a aquellos que se reconocen en ellos y que adquieren una visión más elevada de sí mismos con ayuda de estos mismos valores.

En la comunidad se vive una atmósfera de colaboración y solidaridad auténticas

Trabajar, comprometerse, sacrificarse por valores compartidos
constituyen una filosofía, una psicología social, un método y un conjunto de
técnicas que contribuyen a mejorar la calidad de aquello que se hace

además, ofrece motivaciones e incentiva a la responsabilidad y a la participación.

la comunidad desarrolla lenguajes, narraciones, símbolos, identidad, recursos,
rutinas, normas, recompensas y sanciones, conciencia; aborda conflictos, reflexiona, se adapta, se desarrolla

¿Cuáles son las características de la escuela -organización- comunidad que aprende?

1. Una comunidad con una visión compartida

La comunidad es un conjunto de individuos que se encuentran juntos a partir de relaciones e ideas que han escogido sobre la base de finalidades, de valores, de
aspiraciones e ideales comunes.

conjunto de personas que conscientes de los mismos ideales, con sentido de responsabilidad,
trabajan juntos para la maduración humana y cultural de todos sus miembros

en la comunidad se encuentran personas de edad, de proveniencia, de experiencias diversas pero que encuentran objetivos, valores y modos de ser y de actuar compartidos.

Estas plataformas educativas contienen los principios guía
a través de los cuales se decide qué hacer y cómo hacer. Estas plataformas articulan, en la práctica, los logros y las finalidades de las organizaciones.

2. Una comunidad que cuida al otro:

Una visión compartida, una visión de futuro para construir juntos no puede estar separada de una actitud de estima, escucha, empatía, emotividad positiva, aceptación y intereses compartidos.

En síntesis, una actitud de caring. Paul (1996) sostiene que las comunidades
eficaces se fundan sobre buenas relaciones y que son caracterizadas por tres

componentes: confianza , respeto y aprendizaje.

Cuando existe un bajo nivel de confianza, disminuye la productividad y aparecen actitudes de defensa, de
hostilidad, de lucha por el poder, de empobrecimiento de energía, de sentimientos insaciables, de ansiedad y tensión, de reducción de la creatividad.

cuando existe confianza recíproca, crece la productividad y aparece la amistad, la apertura, la cooperación, el crecimiento de energía, la satisfacción, el sentido de paz, la creatividad y la visión amplia.

3. Una comunidad moral con un fuerte sentido de responsabilidad

las personas se relacionan
con los otros o al propio trabajo sobre la base de un vínculo contractual que define las labores y los roles, fija la remuneración, establece las sanciones en caso de trasgresión o violación de los acuerdos

las buenas relaciones psicológicas son funcionales en cuanto buscan obtener que las personas se involucren haciendo bien aquello que deben
hacer, por medio de un ambiente facilitador.

La norma que regula las relaciones es: “Si hace esto, puede ser recompensado”

4. Una comunidad inclusiva:

una verdadera
comunidad es aquella que no rechaza la diversidad, que no la considera un
obstáculo sino un enriquecimiento.

En una comunidad que aprende, cada miembro tiene un puesto
único.

se caracteriza no tanto por una unión de personas que piensan de la misma
manera sino por la capacidad de involucrar las diferencias compartidas

la verdadera comunidad no busca pasar por alto la diversidad, sino
trabajar por la integración de todo el conjunto.

5. Una comunidad orientada por un liderazgo compartido y que sirve:

un conjunto de personas están unidas por una visión común por la cual todos realizan su propia contribución, comprometiéndose con roles y responsabilidades diferentes, de acuerdo con los valores a través de los cuales se reconocen.

El liderazgo de control, de iniciativa y de autoridad, no es una condición necesaria; antes bien, es el signo de la falta de sentido de una comunidad que aprende, de una comunidad no inclusiva que priva a sus miembros de un diálogo abierto y sincero.

El liderazgo inspira ideas y sueños,
anima y solicita realizaciones concretas de cada uno de los miembros sobre la base de una visión común.

debe ser un espacio enorme en
donde la diversidad sea expresada y celebrada en la vida cotidiana de la
comunidad

6. Una comunidad de profesionales que aprenden:

En una escuela, comunidad que aprende, es necesario estar atentos al cambio del modelo de comportamiento no sólo del dirigente sino de todos los otros
componentes de la comunidad.

Los orientadores excelentes consideran la enseñanza como un conocimiento que debe ser construido y perciben su profesionalidad en un estado de desarrollo continuo.

hace notar cómo los estudiantes se
desarrollan como personas que aprenden si sus maestros u orientadores se presentan como personas que aprenden

De hecho, se reconoce que los
aprendices aprenden más de los actos concretos de los adultos que de sus
palabras.