RESPUESTA INMUNE EN TRANSPLANTE

La estructura de la inmunología del trasplante se basa en el conocimiento de las moléculas del complejo de mayor histocompatibilidad(CPH).

Reconocimiento alogénico

El trasplante de un órgano implica que el sistema inmunitario del receptor se enfrentará a células vivas con
moléculas HLA distintas de las suyas propias y por tanto susceptibles de ser reconocidas como extrañas. El reconocimiento alogénico se produce probablemente en los ganglios linfáticos del receptor por la migración de células dendríticas del donante.

1.Las moléculas del sistema HLA del donante, debido a su función de moléculas presentadoras de péptidos extraños, pueden ser reconocidas directamente sobre las APC del donante, mediante el llamado reconocimiento directo, que no precisa procesamiento del antígeno.

2.Las moléculas HLA del donante pueden ser procesadas por las APC del receptor, estas células las fraccionan en péptidos igual que a otros antígenos bacterianos y los presentan como péptidos extraños en el seno del HLA propio, es lo que se llama reconocimiento indirecto

3.Un último mecanismo de trascendencia aún poco conocida es el reconocimiento por KIR. Las células NK (natural Killer) y CTL, poseen unos receptores llamados KIR que inhiben la actividad citotóxica. Estos receptores reconocen en la célula diana el polimorfismo HLA

Mecanismo del rechazo

El reconocimiento alogénico induce la activación de
diferentes tipos celulares, entre ellos:

1) Los linfocitos T colaboradores o TH1, que secretan mayoritariamente IL-2 e IFNγ. Son los primeros en activarse en la respuesta alogénica, facilitan la expansión clonal y la respuesta inflamatoria

2) Los linfocitos T colaboradores o TH2, que secretan
mayoritariamente IL-4, IL-5, IL-6 e IL-10. Son de activación más tardía. Colaboran en la producción de Ig.

3) Los linfocitos T citotóxicos (CTL), generalmente CD8 pero también CD4, con actividad citolítica mediada por TCR, que matan a otras células por mecanismos que implican la fragmentación del ADN.

4) Y en ocasiones, los linfocitos B aloantígenos específicos que producen Ig.

La respuesta desencadenada por los antígenos HLA
tiene dos componentes: el celular y el humoral

La respuesta celular ocurre casi siempre, es difícil de monitorizar y relativamente sensible a los inmunosupresores clásicos.

Componente celular: El órgano injertado puede verse atacado por tres tipos de mecanismos celulares

1) Linfocitos T citotóxicos específicos (CTL): pueden ser CD8 o CD4. Su mecanismo básico de reconocimiento es el TCR. Inducen la fragmentación del ADN y la apoptosis de la célula diana.

2) Citotoxicidad celular dependiente de anticuerpos (ADCC): en presencia de anticuerpos, las células con receptores para la Fc de las Ig, los pueden utilizar como elementos de reconocimiento, provocando la lisis de la célula diana por un mecanismo independiente del complemento

3) Actividad citotóxica natural o NK: las células NK, al detectar mediante sus receptores la ausencia de determinadas secuencias de aminoácidos en los antígenos HLA de las células del donante, podrían desencadenar su actividad citotóxica natural

La respuesta humoral, por el contrario, sólo es evidenciable en aproximadamente en una cuarta parte de los receptores, es fácilmente monitorizable in vitro, especialmente pretrasplante, y se inhibe poco por los inmunosupresores clásicos

Cuando el sistema inmunitario de un individuo entra en contacto con los antígenos HLA de otro individuo, por embarazo, transfusión o trasplante, el receptor desencadena en un 25% de los casos, una respuesta con producción de anticuerpos.

Mecanismo de tolerancia

Se entiende por tolerancia la aceptación de un órgano alogénico en ausencia de terapia inmunosupresora.
La respuesta linfocitaria depende no solo de la interacción
del antígeno con el TCR, sino también de las señales accesorias que recibe el linfocito T a través de la APC. Estas señales pueden determinar que el linfocito T prolifere, muera por apoptosis o pase a un estado de anergia
clonal con incapacidad para responder al mismo antígeno en el futuro.

RECHAZO DEL INJERTO

Rechazo hiperagudo
La existencia en el receptor de anticuerpos capaces de reaccionar contra el donante en el momento del trasplante determina la aparición del rechazo hiperagudo. Este rechazo se produce rápidamente, y origina una microtrombosis masiva del injerto y un deterioro rápido de la función del órgano, lo que puede obligar a la retirada del injerto. Los inmunosupresores clásicos son poco eficaces en este tipo de rechazo

Rechazo agudo (RA)
El proceso de rechazo celular es lo que se conoce como rechazo agudo. Este rechazo está mediado fundamentalmente por la reacción de las células T del receptor frente a los antígenos alogénicos expresados en el
órgano trasplantado. El reconocimiento de estos aloantígenos pone en marcha la liberación de IL-1 y de IL2, con la consiguiente activación y proliferación de células CD4 y CD8.

Rechazo crónico (RC)
La definición de rechazo crónico no se ha establecido
con exactitud, y se ha acordado caracterizarlo por la
aparición de una serie de cambios clínicos y funcionales
en el órgano trasplantado, acompañados de hallazgos
histopatológicos específicos en el mismo