Kategorier: Alle - infraestructura - rendimiento - educación - clases

af Johanna Guilindro Loor 3 år siden

370

El sistema educativo de Ecuador: Un sistema, dos mundos.

En Ecuador, el sistema educativo refleja una dicotomía entre dos mundos: los que mandan y los que obedecen, todos integrados en un solo sistema. Este sistema perpetúa la inclusión en el ethos moderno mientras excluye a aquellos que no pertenecen a la élite dominante.

El sistema educativo de Ecuador:
Un sistema, dos mundos.

El sistema educativo de Ecuador: Un sistema, dos mundos.

Existe un sistema educativo para dos mundos diferentes .

La transformación radical del modelo educativo es, entonces, no solo un mecanismo para mejorar calificaciones, sino un imperativo para el crecimiento de generaciones en condiciones de libertad.
La naturalización de los procesos de exclusión y de los roles sociales, transmitidos en el proceso de educación y reforzados en diferentes campos de interacción social, son parte de un todo en la modernidad capitalista.
En realidad no se trata de dos sistemas educativos sino de una totalidad que integra dos mundos funcionales entre sí.
Los que mandan y los que obedecen forman su disciplina a lo largo de años, en un dispositivo que funciona con precisión que genera inclusión para la adopción del ethos moderno y, a la par, exclusión en el desarrollo de las capacidades propias de la élite dominante.

Dentro de los factores más influyentes tenemos: La condición de clase, llamada eufemísticamente situación socioeconómica o, cínicamente efecto cuna.

La relación entre la transformación de relaciones de poder en la educación y el aprendizaje es clara y de importancia nodal dado que, en conjunto, todas estas condiciones tienen un impacto de la misma magnitud que el factor socioeconómico.
En Ecuador son notorias las reducciones de los resultados de aprendizaje en todas las asignaturas cuando el índice de violencia grupal es alto, por ello " a menor grado de acoso, mayores puntajes obtenidos" (INEVAL 2015).
El problema central es, la distribución del Presupuesto General del Estado para Educación (PGE-E) y su disposición en función de un modelo de educación.
La actividad de las organizaciones sociales y estudiantiles generó fuerte incidencia en las decisiones de política sobre educación.

Por otro lado, aunque desde el año 2000 el presupuesto de Educación se incrementa en relación al PGE, los gobiernos de este periodo no son los que mayor esfuerzo hicieron en educación.

En el espacio educativo el factor clase no es el único. Existe una relación directa entre el rendimiento académico y la infraestructura de las unidades educativas, las condiciones de aula, la cercanía entre residencia y centro educativo y la disposición de materiales escolares básicos: cuaderno, libro de texto escolar, entre otras.
En la escuela no desaparecen las diferencias de clase, se acentúan.
Los grupos históricamente excluidos, los indígenas y negros, tienen desempeños más bajos desde 4º EGB, sumándose paulatinamente a esa tendencia los montubios.
Las conclusiones del INEVAL (2015) son definitivas en ese sentido:
En los primeros años (4º EGB) existen estudiantes que provienen de hogares con un índice económico bajo pero que alcanzan mejores resultados que los estudiantes que provienen de hogares con un índice económico alto.

Es decir, a mayor índice económico, mayor resultado INEV.

Respecto al aprendizaje y siguiendo al SITEAL en la región se evaluó la comprensión y se demuestra que a medida que pasan los años en la educación las diferencias cognitivas se acentúan.

En 2016 el INEVAL intenta reflejar mejorías en los resultados, especialmente en los promedios globales de las evaluaciones, los resultados recurrentes dan cuenta todavía de enormes carencias.
En 2013 las pruebas Ser Estudiante arrojaron un resultado similar, concluyendo que los problemas de apropiación de conocimientos crecen sostenidamente a medida que avanza el tiempo de permanencia en el sistema educativo.
En 2008 las pruebas "Ser Ecuador" arrojan datos contundentes sobre el estado de los estudiantes que oscilaba entre insuficiente y regular.
Sin embargo, en décimo de básica decrecen las calificaciones con el 55% de preguntas contestadas correctamente y el 30% en matemática.
En el informe "Aprendo 2007" se declaraba que en tercero de básica los resultados tendieron a empeorar en matemáticas y lenguaje.
en 1993 se diagnosticaban problemas serios en el ultimo año de bachillerato cuando "mas de 60 alumnos de cada 100 no alcanzan el nivel que se requiere para continuar sus estudios superiores".
La OREALC acotó que Ecuador presenta puntajes que no difieren del promedio regional en casi todas las pruebas. La excepción es lectura en sexto grado, donde el promedio del país es significativamente menor al promedio regional.
Ecuador se encuentra en el grupo de países con menos del 50% de respuestas correctas, es decir, en promedio sólo la mitad alcanza los objetivos propuestos.

En cuanto al acceso a la educación superior los exámenes de ingreso no son nuevos y hay reducciones en las restricciones al ingreso.

La desigualdad es evidente al comparar la asignación de recursos y presupuestos entre las universidades públicas frente a las cofinanciadas y las privadas.
Entre las 10 universidades con mayor presupuesto en Ecuador se encuentran 5 privadas y cofinanciadas; el presupuesto de las universidades privadas más importantes llega a ser igual al presupuesto de tres, cinco e incluso nueve universidades públicas juntas.

En promedio, las universidades cofinanciadas tienen casi una vez y media , 143%, más presupuesto por estudiante y las universidades privadas tiene casi tres veces, 288%, más presupuesto por estudiante que las universidades públicas.

Los exámenes de ingreso son una política excluyente, en tanto extemporáneos. Sostienen a desigualdad preexistente: en las zonas rurales, entre los más pobres, entre los indígenas y afroecuatorianos.
En 2008, 4 de cada 10 estudiantes no pasaron las pruebas de ingreso, en tanto 9 de cada 10 jóvenes aprueban el ENES en 2013.
Sin embargo, pese a que cada estudiante registra sus preferencias educativas, no existe elección de carrera a estudiar porque las pequeñas diferencias en el rendimiento de los exámenes son determinantes y exime a quienes proceden de los estratos socioeconómicos más bajos de su derecho a seguir su carrera anhelada.

La incidencia del analfabetismo se redujo, especialmente entre las décadas de 1970 y 1990 como resultado de las luchas de los sectores sociales por el acceso a la educación.

Actualmente, el analfabetismo se presenta sólo en la población que conjuga menores ingresos, tercera edad. femenina entre indígenas, montubios y negros.
Es decir, las tasas más altas de analfabetismo corresponden a las generaciones y sectores históricamente relegados.
21 programas y proyectos de alfabetización entre 1944 y 2009.

Las demandas por el derecho a la educación fueron un pilar fundamental entre las reivindicaciones de los sectores populares, en 1951 muchos se oponían a la educación de los indígenas.