El enfoque sistémico complejo en la orientación familiar considera a la familia como un sistema activo y abierto, con identidad propia y capacidad de autoorganización. Este enfoque se fundamenta en modelos ecológicos que incluyen microsistemas, mesosistemas y macrosistemas, analizando las interacciones y patrones dentro de la familia, como la rigidez, la negación y la sobreprotección.