La revelación divina se desarrolla a través de varias etapas clave donde Dios interactúa con la humanidad. Inicialmente, Dios crea al hombre y forma al pueblo de Israel, infundiéndoles esperanza en una salvación futura que abarcará a todas las naciones.
El Hijo es la palabra definitiva del padre de modo que no habrá otra revelación después de El
Dios dice todo en su verbo
Dios se ha revelado al hombre comunicándole gradualmente su propio ministerio mediante obras y palabras
Dios formo a su pueblo de Israel
Dios forma a su pueblo en la esperanza de la salvación, en la espera de una Alianza nueva y eterna destinada a todos los hombres (cf. ... Ez 36), una salvación que incluirá a todas las naciones (cf. Is 49,5-6; 53,11).
Dios elige a Abraham
Te prometo que vas a tener una descendencia más numerosa que las estrellas del cielo. Tuvo un hijo, Isaac.
Dios le pidió que sacrifique a su hijo como prueba de amor y lealtad.
Dios le dijo a Abraham: Serás padre de muchísima gente, de un gran pueblo. Yo seré el Dios de ustedes, y ustedes serán mi Pueblo.
La alianza con Noe
Dios establece una alianza con Noé (Gn 6,18; 8,20-9,17), dando así a la noción de alianza una perspectiva universal. El establecimiento de esta alianza con Noé después del diluvio sirve para confirmar el proyecto creacional original de Dios que había sido destruido por el diluvio.