Desde antiguo, la humanidad ha buscado respuesta a esas grandes preguntas, y una manera de acercarse a sus respuestas es el estudio de la prehistoria y de nuestros antepasados. Desde que se aceptó de forma generalizada la teoría de la selección natural de Darwin y el hecho de que las especies no son inmutables, muchos estudiosos y aventureros se han afanado en buscar a nuestros ancestros, en reconstruir la cronología de la especie humana, en encontrar a ese ‘eslabón perdido’ o forma intermedia a partir del cual nuestro linaje se separó del de los simios.
af Erick Wagner Nalvarte Leon