El enfoque arquitectónico se centra en la transformación y manipulación de los espacios para crear ambientes que se asemejen a un hogar acogedor en lugar de una prisión. Este estilo arquitectónico se inspira en diversas influencias culturales, como las obras islámicas, griegas y japonesas, y se caracteriza por el uso predominante del color blanco, muros pantalla sin aberturas y espacios continuos y diáfanos.