von Jose Guerrero vor 2 Tagen
28
Mehr dazu
Integrantes:
Jose Guerrero
Clelia Lanza
La Nación Algonquina es un grupo indígena originario de América del Norte, específicamente en las áreas de Canadá y los Estados Unidos. Los algonquinos son conocidos por su lengua, que pertenece a la familia lingüística algonquina, una de las más grandes de América del Norte.
En cuanto a su religión, la cosmovisión de los Algonquinos es profundamente espiritual y está vinculada a la naturaleza. Creían en un mundo animista, en el que los animales, plantas y elementos naturales tenían espíritus. Los Algonquinos adoraban a un ser supremo, conocido como el "Gran Espíritu", que representaba el poder divino que se manifestaba en todas las cosas. Además, tenían creencias sobre los espíritus de sus antepasados y su conexión con el mundo espiritual
La religión de la Confederación Iroquesa era monoteísta, y se basaba en la creencia en un solo Dios, al que se le llamaba el Gran Espíritu. Los iroqueses creían que este Dios había creado todas las cosas.
Los iroqueses también creían en la igualdad de todas las criaturas vivientes, y establecían relaciones especiales con algunas de ellas.
En materia religiosa la tribu Anasazi rendía culto a dioses paganos relacionados con la naturaleza. Tenían ritos de distinta índole, pero uno de los más comunes era el relacionado con la lluvia. En los primeros años de su existencia ésta abundaba en su zona pero con el paso de los años, y debido a la sobreexplotación del terreno en el ámbito medioambiental, fue escaseando cada vez más hasta que casi desapareció, dando paso a una zona árida prácticamente desértica. En este punto y agotando los intentos de "reconciliarse con los dioses" a través de distintos ritos entre los cuales parece que podrían encontrarse sacrificios humanos, comenzaron su éxodo hacia el sur en busca de tierras más fértiles. Sin embargo, los colonizadores europeos tenían otros planes para ellos: acabar con su cultura y su religión, convertirlos al cristianismo y casi exterminarlos con nuevas enfermedades ante las cuales la tribu no estaba inmunizada.
La religión en los Andes Centrales antes de la llegada de los españoles estaba profundamente ligada a la naturaleza ya una visión panteísta y animista del mundo. Las civilizaciones andinas, como los incas, wari y tiwanaku, adoraban a Múltiples dioses relacionados con elementos naturales como el sol, la luna, las montañas y el agua. El dios principal del Imperio Inca era Inti, el dios del sol, y también veneraban a Viracocha, el creador del universo. Otros dioses importantes eran Pachamama (Madre Tierra), Mama Quilla (diosa de la luna) e Illapa (dios del trueno y la lluvia). Además, se practicaba el culto a los apus, los espíritus de las montañas sagradas, y se realizaban sacrificios para mantener el equilibrio con la naturaleza.
Con la llegada de los españoles en el siglo XVI, la religión andina fue sustituida progresivamente por el cristianismo, aunque muchas tradiciones indígenas sobrevivieron y se mezclaron con la fe católica, dando origen a un sincretismo religioso que aún se observa en la actualidad.
La religión de la cultura Nazca era politeísta y basada en la naturaleza, con dioses como Kon (viento y lluvia) y el Dios de los Bastones (fertilidad y poder). Los geoglifos de Nazca podrían haber tenido un propósito ceremonial. Realizaban sacrificios humanos y rituales para atraer la lluvia y asegurar la fertilidad. Su legado influyó en las culturas andinas posteriores.
La religión mochica era politeísta y ritualista, con deidades vinculadas a la naturaleza y la guerra. Su principal dios era Ai Apaec, el Dios Degollador, protector de la fertilidad y la guerra. También veneraban a dioses del sol, la luna y el mar. Los sacrificios humanos eran comunes en sus ceremonias para garantizar la protección y fertilidad de la tierra. Sus templos, como la Huaca del Sol y la Huaca de la Luna, eran centros religiosos donde los sacerdotes dirigían los rituales. Su legado influyó en las culturas andinas posteriores.
La cultura olmeca era religiosa y teocrática. Eso significa que su organización social y política estaba atravesada por sus ideas religiosas.
Su cosmovisión se plasmó en una imagen específica: un ser mítico que tiene una hendidura en forma de V en la cabeza, de la que nace una planta de maíz, símbolo del poder real y del árbol cósmico que comunica el cielo con el inframundo. Según los olmecas, la tierra era un plano con cuatro puntos extremos y uno en el centro, que era el eje del mundo.
A través del arte, manifestaron muchas de sus ideas y creencias religiosas. Construyeron numerosas esculturas monumentales. Las más conocidas son las 17 cabezas de basalto que se hallaron en sus cercanías. Se trata de cabezas colosales cubiertas por cascos, todas con rasgos que las diferencian entre sí. Los arqueólogos consideran que dada la particularidad de sus rostros, las cabezas son retratos de los diferentes gobernantes.
La religión era politeísta y sus deidades representaban elementos de la naturaleza como el maíz, los astros, los volcanes, etc. Los olmecas consideraban que ciertos animales eran sagrados, como el cocodrilo, el tiburón y la serpiente; y el jaguar, al que se rendía un culto especial.
Además, crearon imágenes en las que las deidades tomaban formas fantásticas que mezclaban cuerpos humanos y de animales. Los especialistas afirman que la religión era dinástica: los olmecas consideraban que sus gobernantes eran herederos directos de los dioses. Las representaciones escultóricas reafirman la posición y el lujo de la élite. En muchas imágenes, los gobernantes aparecen junto a seres sobrenaturales, lo que les confiere un carácter semidivino.
La religión azteca, también conocida como mexica, es el conjunto de creencias, leyendas y mitos que tenía esta población, siendo, en general, un conjunto de obras de culturas anteriores que los pensadores mexicas transformaron.
Para entender esta religión se debe hablar sobre sus características, siendo esto esencial para conocer en profundidad el pensamiento de esta civilización y la particularidad de su mitología. Dichas características, son las siguientes:
- El sol era un valor clave para ellos, ya que lo consideraban un símbolo muy importante en la religión y que a causa de él existían muchos actos, rituales y deidades.
- Al igual que para muchas religiones primigenias, la muerte tenía un rol fundamental.
- Creían en muchas leyendas y la vida tras ella, y realizaban sacrificios para los dioses.
-Tenían variedad de dioses.
- Existen muchas leyendas sobre la creación del mundo, pero la más conocida es la que se dice de los intentos que los dioses mexicas realizaron antes de la creación.
- Consideraban que el mundo era cíclico y que estaba dividido en cuatro partes, terminando y volviendo a empezar cada 52 años en un mundo sin final.
- Para ellos las enfermedades eran de origen divino, siendo una especie de castigo de los dioses por el mal comportamiento de los humanos.
- La dualidad era un elemento clave para los mexicas, siendo muy común la existencia de dioses con una versión masculina y femenina.
Los mayas eran politeístas. Es decir, adoraban a diferentes dioses relacionados con la naturaleza. Sus principales deidades fueron Hunab Ku e Itzamná. Aunque también tenían otros dioses en representación de la lluvia, el viento, la muerte, la guerra, etc. Todos los rituales mayas tenían su origen en la mitología.
Los máximos responsables de la conocida como religión precolombina eran los sacerdotes. Ellos eran los encargados de entender y explicar el por qué de las cosas, así como de presidir los actos rituales y religiosos de los mayas. En la religión maya, los cultos y las creencias eran un fiel reflejo de una mitología fuertemente enraizada en el pensamiento popular. Por lo que sus prácticas religiosas constituían un lenguaje capaz de comunicar a los hombres con el inframundo.