por Jonatan Alvarez hace 3 años
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Un nosotros, los prestos a iniciarse en el mundo de la enseñanza sistematizada, que le da sentido y pertenencia a la experiencia educativa y nos recuerda que no estamos solos
Un objetivo común, una decisión compartida, objetiva, da seguridad y tranquiliza
Nadie puede enseñar lo que no conoce y si enseñar es dar a conocer el mundo, el docente tiene que poder recuperar y re-significar formas abiertas de ver el mundo
En este proceso cada uno irá tomando confianza en sí mismo, reconociendo la relevancia de lo que hacen quienes también se presentan como sujetos formados y en formación
Se señala el sitio o el recorrido mediante el cuál se accede al bien o se señala la magnitud del mal
El mostrar cómo se hace tiene sentido siempre que el “modelo” muestre o cuente cómo lo ha hecho
Se requiere práctica y ejercitación de lo aprendido y de lo que se va aprendiendo. Practicar cómo hacerlo y cómo enseñar en diferentes situaciones
Probar es ensayar y ensayar es en cierta forma es eso
Esos espacios tienen un alto potencial formador y transformador si se convierten en ámbitos de experimentación y de puestas a prueba de experiencias pedagógicas diversas.
Probar, reconocer algo antes de usarlo. Sin temor
El aprendizaje por ensayo y error suele acontecer solitariamente en los inicios de la profesión
No se ve en qué aspectos puede tener utilidad insistir en un formato que suele requerir para funcionar una caricaturizada diferencia generacional, cuando no la lisa y llana memorización del otro
Frente a otro que funciona a partir del trabajo metódico pero profesional que supone el intercambio de conocimientos y experiencias entre pares
Preparar para el oficio docente es, reducir la distancia entre el contenido de la transmisión y la forma de efectivizarla
Enseñar el oficio es practicarlo. Y practicarlo mucho
El oficio constituye el centro que aglutina y da sentido al proceso formativo
En el caso de la enseñanza, hay un oficio que transmitir y un oficio de transmisión
No hay oficio sin obra, sin menester y sin misterio
Se puede evaluar el desempeño sin otorgar relevancia a la obra
Probablemente podamos afirmar que la eficacia de una formación se hace visible si sumamos “desempeño + obra”
Un desempeño modesto no nos permite leer con tanta eficacia el suceso de una formación como sí lo hace una obra fallida
Es a través de sus obras como valoramos a los enseñantes, su formación y sus enseñanzas
El interés conlleva una preocupación genuina por los resultados
Debut y desafío
Iniciación y prueba
Se trata entonces de “experiencias homólogas y complementarias” que afectan a todos
El maestro halla tanto placer en enseñar como el alumno en aprender
Hay que explicar, justificar las acciones y las decisiones que se toman respecto de la transformación de los otros
Quien enseña tendría como meta fundamental transformar a los otros
Es la constatación de lo hecho o producido, como producto del propio trabajo, lo que asegura no sólo confianza y autorizad hacia la figura del docente, en este caso, sino identidad profesional
Alguien oficioso, es eficaz para determinado fin