La gestión financiera de una empresa se centra en estructurar y manejar tanto los recursos económicos como las obligaciones financieras. La inversión se enfoca en adquirir bienes y derechos, buscando siempre una rentabilidad óptima.
Es conseguir los recursos necesarios para emprender un proyecto determinado, con un coste conocido. Se denominan FUENTES DE FINANCIACIÓN a las diferentes procedencias de las cuales pueden obtenerse recursos financieros.