LOS 7 PECADOS CAPITALES DELA INVESTIGACIÓN UNIVERSITARIA

El dominio de la Burocracia

En todas las universidades hay dos tipos de personajes claramente definidos: los Burócratas y los Académicos. Ya sabemos que en toda organización,
definida por unos procesos que conducen a unos productos terminales, la Burocracia equivale a los sistemas de ordenamiento y control del modo en que los
contenidos de trabajo fluyen desde su punto de partida hasta su punto de llegada a través de las arterias o trayectorias de proceso. La Academia, en cambio,

equivale al contenido sustantivo de lo que fluye por esas arterias y trayectorias. La Academia se dedica, por ejemplo, a investigar sobe un problema, mientras

que la Burocracia se dedica a controlar la permisología requerida, los tiempos de ejecución, los trámites para actuar… y aún a designar quiénes deben

desempeñar tales o cuales funciones y cargos dentro del sistema de producción

Desconexión de las demás Funciones Universitarias

tema que cubre las relaciones con el entorno, especialmente aquellas relaciones que funcionan en el sentido de la demanda-oferta de conocimientos y
tecnologías. La Extensión suele saber mucho sobre el entorno, suele estar al tanto de qué cosas constituyen áreas de demanda y de necesidades y suele
también tener buenos datos acerca de cuáles son las áreas de impacto e influencia hacia las cuales la universidad podría dirigir sus producciones científicas y

tecnológicas. Es en realidad en todos esos datos de la Extensión universitaria donde la Función de Investigación debería encontrar las redes de problemas

investigativos que luego pudieran ser traducidas en programas y agendas de investigación ejecutables a corto, mediano y largo plazos. P

Orfandad epistemológica

En nuestros países no se suele profundizar en qué es la investigación, qué es lo que estamos haciendo, por qué trabajamos del modo en que
trabajamos ni a qué obedecen o sobre qué se fundamentan las tomas de decisión dentro de la actividad de investigar. Simplemente aprendemos un cierto
modo de hacer las cosas, una cierta rutina, y continuamos por ese camino como si tuviéramos gríngolas. Por encima de todo eso están nuestros inefables y

nunca bien ponderados profesores de Metodología, la mayoría de los cuales raras veces investiga, pero sí se empeña en decirnos cómo tenemos que

investigar.

Dependencia y colonialismo

Las relaciones entre las esferas nacional e internacional en lo concerniente a producción de conocimiento científico es una perfecta réplica de esas
mismas relaciones en lo concerniente a producción económica global y a regulaciones de dominación socio-política. Así como somos países tercermundistas,
colonizados y dominados desde un punto de vista político-económico, así también somos investigadores tercermundistas, colonizados y dominados desde un

punto de vista científico-tecnológico e investigativo.

La desarticulación y fragmentación

Los trabajos de investigación no suelen tener nada que ver unos con otros. Si Ud. revisa cualquiera de los compendios de resúmenes de investigaciones
que se suministran en las jornadas de investigación de las universidades, difícilmente conseguirá en ese compendio dos investigaciones que tengan algún
parentesco entre sí. Es algo así como la construcción de la Torre de Babel, cuando cada obrero hacía algo que no tenía nada que ver con lo que hacía otro,

porque cada quien hablaba un lenguaje diferente y tenía un plan diferente, que resultaban inaccesibles a los demás.

El Individualismo

La investigación universitaria tercermundista está enfocada bajo una concepción individualista de la universidad, derivada de una visión también
individualista de la sociedad. La visión individualista es opuesta a una visión colectivista. Las diferencias entre ambas visiones pueden describirse como sistemas
antagónicos de creencias

Investigar por investigar

La universidad tercermundista, en general, no se interesa en productos de investigación, sino en procesos de investigación. No les importa lo que se
produzca, sino sólo aquellos elementos que puedan llevar a pensar que se hace investigación. Aquí radica una de las más graves contradicciones desde el
punto de vista de cualquier teoría de la acción racional: el interés radica en promover la investigación, en destacar que se hace investigación, en convocar a

eventos sobre investigación y miles de cosas más orientadas a la investigación como proceso, pero jamás en atender a los productos ni al modo en que tales

productos puedan ser aprovechados o utilizados. En efecto, pregúntese sólo lo siguiente: ¿sabe Ud. a dónde van a parar los resultados de la investigación

universitaria tercermundista? ¿Sabe Ud. para qué sirven? ¿Sabe Ud. a quiénes va dirigida, quiénes son sus usuarios y beneficiarios?