Este autor caracteriza los procesos psicológicos de un individuo que se enfrenta a un dilema moral
Uno de los mayores ponentes
¿Qué son?
Se clasifica en dos
¿QUÉ SON?
SE DIVIDEN EN DOS

MODELOS DE ANÁLISIS DE CASOS EN ÉTICA CLÍNICA

Según un dilema ético-clínico. Bernard define esta situación como

"La dificultad en la toma de decisiones frente a un paciente, en cuya resolución es necesario referirse a valores o principios que especifiquen lo que debe ser hecho en oposición a lo que simplemente fue hecho o frecuentemente se hace"

De allí se despliegan dos dimensiones

1. Clínico, porque se presenta en la práctica de la medicina.

2. Ético, porque hace referencia a la búsqueda de lo correcto o incorrecto de los actos humanos.

MODELOS DE FUNDAMENTACIÓN

Los modelos utilitarista, deontológico, personalista, entre muchos otros.

MODELOS DE ANALISIS

Metodologías prácticas que le permitan llevar a cabo una valoración normativa de los actos concretos en el ámbito sanitario.

NORMATIVOS

Los modelos normativos surgen a partir de la moral tradicional y pueden ser vistos como la aplicación de un modelo de fundamentación determinado a los casos de la vida cotidiana. Se describe que, debido a su origen, estos modelos son más efectivos en establecer lo correcto o incorrecto de una determinada conducta; sin embargo, la descripción que obtienen de la situación puede ser insuficiente, con el riesgo de no incluir en el análisis todos los elementos a considerar.

Fase descriptiva

En que se recopilan datos sobre el problema a analizar.

Fase de Juicio

En que se aplican las normas o un sistema de fundamentación ética a la situación particular, que ahora se comprende mejor gracias a la información recopilada en la fase anterior.

DESCRIPTIVOS

Provienen de disciplinas que estudian el comportamiento humano, como la psicología, y se basan principalmente en teorías y trabajos experimentales sobre el proceso de toma de decisiones, identificando los factores que intervienen en la resolución del conflicto.

Thomas Jones : “intensidad moral” se relaciona de manera directamente proporcional con la probabilidad de identificar un problema ético en una situación determinada

Se analican las siguientes variables

Probabilidad

Proximidad

Conseso Social

Inmediatez temporal

Concetración

Magnitud

Un acto con alta probabilidad de generar un daño significativo e inmediato a varias personas próximas al agente, tendrá una gran intensidad moral, y resulta altamente improbable que no sea reconocido como un dilema ético

Se indentifican 3 fases

Sensibilidad moral

Que incluye la interpretación de la situación y el reconocimiento del modo en que las alternativas de acción pueden afectar a los involucrados

Juicio moral

Es decir, el proceso deliberativo que debe efectuarse, en que se refleja la integración de valores e ideales con las circunstancias pertinentes.

Motivación moral

En que los agentes se identifican y comprometen con la propuesta y aceptan la responsabilidad por las consecuencias de la misma, es decir “desean” llevarla a cabo que incluye habilidades y estrategias necesarias para una adecuada ejecución de la decisión (comunicación, autocontrol, empatía, honestidad).

MODELOS DE LA ÉTICA CLÍNICA

La casuística se define como “la interpretación de los problemas morales, empleando procedimientos del razonamiento basado en paradigmas y analogías, que conduce a la formulación de una opinión calificada sobre la existencia y el rigor de ciertas obligaciones particulares, expresadas en términos de normas o máximas generales, pero no universales ni invariables, dado que se aplican con certeza únicamente en las condiciones características del agente y las circunstancias de acción”

Este es uno de los modelos para la resolución de los dilemas morales de más larga data, y se originó en el estoicismo, entre los siglos III a.C. y II d.C., y floreció entre los siglos XV y XVI. Debido a su simpleza, llegó a ser uno de los modelos más utilizados en la bioética actual (2,10). De acuerdo con este método, los elementos del acto moral —objeto, fin y circunstancias— son la fuente para la calificación moral del mismo, por lo tanto, deben ser analizados conjuntamente sin poder aislar el acto de los factores que lo rodean. La descripción detallada de estos elementos constituiría un “caso” sobre el cual se realizan los juicios morales. El patrón para evaluar la conducta a seguir son las “máximas”, entendidas como normas generales de acción —por ejemplo, “el médico no debe dañar a sus pacientes”, “a los pacientes no se les deben imponer los tratamientos”. Como su aplicación se efectúa en casos definidos, no es posible establecer la validez universal de ninguna máxima.