Pánico escénico

Reacción de ansiedad que se da ante una situación social muy específica. Se presenta cuando una persona debe realizar algún tipo de actividad ante el público, ya sea hablar, cantar, actuar, etc.

Ahogo o dificultad para respirar, temblores, taquicardia, sudoración o escalofríos, mareos, náuseas, diarreas,
frecuentes ganas de orinar, enrojecimiento facial, fuerte dolor de cabeza, tensión muscular, etc.

A nivel psicológico:

Dispersión, confusión, dificultad para
atender, concentrar y recordar. Aparición de pensamientos negativos e invalidantes sobre la propia persona o su actuación. Miedo al fracaso, a la crítica negativa, a hacer el ridículo

A nivel conductual:

Torpeza, volumen de voz o instrumento musical bajo, hablar o tocar excesivamente rápido, paralizarse, tartamudear o desordenar los dedos tocando, balbucearse, trabarse, quedarse en silencio, comportarse en modo automático

Su inicio varía dependiendo de cada persona, hay gente que no recuerda un comienzo puntual, y por tanto aseguran sufrirlo desde siempre.

La puntualidad

La conciencia corporal

Perder el miedo a perder,

La práctica,

Tolerar las sensaciones que se experimentan

La pasión nace de la investigación,

Conocer el recorrido de la ansiedad,

Conceder permisos

La clave es:
Tratar de ver el miedo como un aliado, en lugar de un enemigo. Comprender su propia psicología y descifrar lo que hay detrás de esos temores. Comenzar por su propia inteligencia emocional, sus sentimientos, la forma como los expresa y cómo aprecia los sentimientos y emociones de los demás.

Algunas personas rechazan puestos o actividades laborales que suponen exponerse al público. Emocionalmente, conlleva unos sentimientos de incapacidad y de falta de autoestima. Si se siente miedo a la hora de presentarse en público y no se han desarrollado las habilidades necesarias para ello,