El tejido adiposo
El tejido adiposo no sólo es un órgano almacenador de energía, sino que también sintetiza un gran número de proteínas de modo paracrino, endocrino y autocrino, y que además controla diversas funciones relacionadas con el metabolismo.
Proteínas que se les conoce como adipocinas. Se han descrito más de 50 de éstas.
son importantes en la homeostasis de la glucosa modulando la sensibilidad a la insulina, que se deriva de la participación de estas proteínas en procesos inflamatorios y de remodelación vascular.
leptina
La leptina fue la primera hormona descubierta que es secretada por el adipocito.
Investigaciones sobre la mutación de un gen, que a la postre se le conocería como lepob, demostraron que la ausencia de éste y de su producto logró producir ratones obesos (ob/ob), que carecían del reflejo de saciedad a nivel hipotalámico.
La leptina es una hormona con un peso de 16 kilodaltons (kDa), que se expresa primordialmente en el adipocito, aunque también se ha reportado su secreción en la placenta, músculo esquelético, estómago e intestino.
Las concentraciones séricas de la leptina se encuentran reducidas durante el ayuno y en personas con un IMC menor a 25, mientras que éstas se encuentran aumentadas en personas obesas.
La adiponectina es una hormona sintetizada por el tejido adiposo que participa en el metabolismo de la glucosa y los ácidos grasos. Es la adipoquina más abundante secretada por los adipocitos.
Esta adiponectina cruza la barrera hematoencefálica mediante un transportador saturable que la lleva de la circulación al tejido nervioso, teniendo como órgano blanco al hipotálamo, primordialmente el centro de la saciedad en donde disminuye los niveles del péptido Y, produciendo la sensación de saciedad.
Su mecanismo de acción es por medio de receptores transmembrana acoplados a 5’-AMP proteína cinasa (AMPK).
se encuentran en el hígado y el músculo, acoplados a vías anabólicas como lo son: la síntesis de proteínas, síntesis de colesterol, ácidos grasos y triglicéridos, provocando disminución de la resistencia a la insulina.
Resistina
Otra de las hormonas secretadas por el adipocito es la resistina, se trata de un péptido de 10 kDa.
la resistina ha sido encontrado en grasa visceral, así como en grasa parda; sin embargo, en humanos la expresión de la resistina es mayor en monocitos y en otras células inmunológicas que en el propio adipocito.
El adipocito no sólo puede ser considerado como un órgano endocrino, sino también como parte del sistema inmunologico.
hay una relación entre el sistema endocrino y el sistema inmunológico que se observa de manera clara en el adipocito, con la síntesis de la ASP. (acido aspartico)
El tejido adiposo y la inflamación
el tejido adiposo, éste se encuentra integrado no sólo de adipocitos, sino también por macrófagos, preadipocitos, fibroblastos, linfocitos (al parecer pudiesen ser los orquestadores de la respuesta inflamatoria del tejido adiposo), y que además es un órgano altamente vascularizado, lo que permite la distribución de sus secreciones a toda la economía.
Los adipocitos, al ser estimulados, ya sea con endotoxinas o por componentes de la pared celular, aumentan la expresión de receptores tipo Toll, receptores de lecitinas y receptores de interleucinas, propiciando así una mayor autoactivación, para poder responder de manera enérgica ante los estímulos externos por medio de diversas citocinas, que pueden actuar de manera local o de manera sistémica.
Los macrófagos tienen un papel principal en la inflamación, tanto dentro del tejido adiposo como a nivel sistémico; sin embargo, los adipocitos también han demostrado tener propiedades inflamatorias por sí mismos.
los macrófagos, los adipocitos son sensibles a diversos agentes infecciosos mediante los receptores tipo Toll de lipopolisácaridos, así como a mediadores inflamatorios que provienen de la circulación, que actúa a través de receptores