En muchas áreas urbanas, las raíces de los árboles causan problemas significativos al dañar veredas, pavimentos y estructuras cercanas. Este fenómeno genera levantamientos del suelo, grietas y huecos que dificultan el tránsito, especialmente para niños, ancianos, personas con discapacidades visuales y aquellos que utilizan sillas de ruedas, muletas o bastones.