El arte hispano-musulmán se destaca por la construcción de la Mezquita de Córdoba, que fue ampliada en varias fases por diferentes califas, como Abderramán I, Abderramán II, Alhakén II y finalmente Almanzor, quien duplicó su extensión.
El arte mozárabe se desarrolló en el siglo X, en el área bajo el dominio cristiano. Se edificaron iglesias, que utilizaron arcos de herradura y se cubrieron de madera o con bóveda de cañón de herradura.
Iglesia de San Miguel de Escalada
El arte asturiano se desarrolló entre finales del siglo VIII y principios del siglo X en el reino de Asturias. Se construyeron pequeñas iglesias y palacios que emplearon arcos semicirculares y se cubrieron con bóveda de cañón.
Iglesia de San Miguel de Lillo
El arte románico
Otras manifestaciones artísticas fueron la escultura, situada en capitales y portadas de las iglesias, y la pintura mural.
la arquitectura románica se desarrolló en los siglos XI y XII, y tuvo dos focos principales.
El foco del Camino de Santiago, ligado al románico francés y al Camino de Santiago
Catedral de Santiago de Compostela
El foco catalán se caracterizó por la decoración de arquillos ciegos y la realización de iglesias con campanarios muy desarrollados.
Campanario de San Clemente
Arte califal
El palacio de Medina Azahara formaba parte de una ciudad-palacio, construida por Abderramán III en el siglo X ( entre 936 y 976) para ser la capital del califato, residencia real y sede del gobierno.
Palacio de Medina Azahara
La mezquita de Córdoba se construyó en varias fases, por que se fue ampliando a medida que crecía la población de la ciudad. El primer edificio lo levantó Abderramán I en el año 785. Después lo ampliaron Abderramán II (833) y Alhakén II (961). Finalmente, Almanzor realizó una ampliación lateral (987),duplicando así su extensión.
Mezquita de Córdoba
La sala de oración consta de varias naves, separadas por arquerías que sostienen un techo adintelado. Con el fin de dar mayor altura al edificio.